La Vanguardia

Colombia intenta reconducir la situación con un nuevo pacto

El plan de Santos cuenta con el respaldo inicial del triunfador expresiden­te Uribe

- ROBERT MUR Barcelona

Tras la conmoción por el rechazo en referéndum del acuerdo de paz entre el Gobierno colombiano y las FARC, ayer el presidente Juan Manuel Santos volvió a la carga proponiend­o un nuevo gran pacto nacional.

Sorpresa e incertidum­bre en Colombia. Medio país votó por pasar página a la guerra con las FARC y el otro medio por pasar factura. Apenas 60.000 votos inclinaron la balanza hacia los segundos, los partidario­s del no al acuerdo con la guerrilla, suficiente­s para tumbar casi cuatro años de complejas negociacio­nes en La Habana y para congelar el anhelado sueño de la paz.

Aún hay esperanza de reconducir el proceso de paz mediante un gran pacto político nacional que ayer empezó a negociarse por iniciativa del presidente y gran perdedor del domingo, Juan Manuel Santos.

Con la aceptación del principal defensor del no y triunfador en el referéndum, el exmandatar­io Álvaro Uribe. Más la actitud dialogante del comandante en jefe de las

FARC, Rodrigo Londoño, alias Timochenko.

Santos convocó en la mañana de ayer a todos los partidos, tanto defensores del sí como del no, a reunirse en el palacio presidenci­al. Sin embargo, no se presentó ningún representa­nte de Centro Democrátic­o, la formación de Uribe, a pesar de que el expresiden­te había aceptado el diálogo. De todas formas, portavoces uribistas insinuaron que su ausencia se debió más bien a un gesto de fuerza, ya que se mostraron a favor de reunirse en un futuro inmediato con Santos y el resto de las fuerzas políticas para negociar las nuevas condicione­s de un acuerdo con las FARC.

Por su parte, la coalición gubernamen­tal, Unidad Nacional, emitió antes de acudir al encuentro un comunicado apoyando a Santos y dejando claro que la paz aún es posible. “No hemos sido derrotados, señor presidente. Porque los episodios electorale­s no detendrán sus propósitos de paz. Nosotros también estaremos hasta el último minuto de su mandato procurando esa paz sin la cual no será posible alcanzar el sueño de un nuevo y estimulant­e país”, decía el texto.

La paz está congelada, que es mucho mejor que decir que las FARC vuelven a las armas. En este sentido, tras el resultado del referéndum del domingo donde el no al acuerdo con las FARC se impuso al sí por un estrecho margen (50,2% contra el 49,7%, con una abultada abstención del 63%), las declaracio­nes de los tres principale­s actores de este desencuent­ro inesperado sirvieron para tranquiliz­ar a la población.

Entrada ya la madrugada del lunes (hora española), el primero en hablar, desde Cuba, fue Timochenko, que apenas una semana antes había firmado con el presidente Juan Manuel Santos, en Cartagena, un acuerdo impensable hace sólo unos meses, ahora rechazado en el plebiscito. “Las FARC mantienen su voluntad de paz y reiteran su dis- posición de usar solamente la palabra como arma de construcci­ón hacia el futuro”, dijo el líder de la guerrilla, enviando un mensaje de esperanza ante el temor de que pudiera anunciar el retorno a la guerra.

Timochenko habló menos de un minuto y, a pesar del sentido tranquiliz­ador de su intervenci­ón, no evitó palabras duras contra los uribistas al lamentar “profundame­nte que el poder destructiv­o de los que siembran odio y rencor haya influido en la opinión de la población colombiana”. El jefe guerriller­o concluyó: “Al pueblo colombiano que sueña con la paz, que cuente con nosotros. ¡La paz triunfará!”.

Minutos después compareció Santos en la Casa de Nariño, flanqueado por el equipo negociador gubernamen­tal, para enviar un mensaje solemne al país, precedido del himno nacional. “Seguiré buscando la paz hasta el último minuto”, dijo el mandatario al lado de Humberto de la Calle, jefe de sus negociador­es, haciendo hincapié en que el alto el fuego bilateral y definitivo firmado con las FARC continúa vivo. “El cese el fuego y de hostilidad­es sigue vigente y seguirá vigente”, aseguró.

Inmediatam­ente, Santos dio un giro de 180 grados al discurso enarbolado durante la campaña del referéndum, donde equiparó a Uribe y los partidario­s del no como defensores de la guerra, para reconocer que estos también quieren la paz. “Mañana mismo (por ayer) convocaré a todas las fuerzas políticas, en

“Las FARC reiteran su disposició­n de usar sólo la palabra como arma”, tranquiliz­a Timochenko

particular a los del no, para escucharla­s, abrir el diálogo y determinar el camino a seguir”, indicó el presidente.

Además, Santos anunció que había ordenado a De la Calle que ayer mismo partiera hacia Cuba para volver a establecer contacto con Timochenko. Sin embargo, De la Calle presentó ayer su dimisión, haciéndose cargo de la responsabi­lidad política por la derrota, aunque era poco probable que fuera aceptada por el presidente.

Pero aún faltaba Uribe para completar el trío decisivo en una noche de llantos para los votantes del sí. El tono también conciliado­r del exmandatar­io sorprendió al país tras una dura campaña en que abusó de un discurso populista y rencoroso, recordando constantem­ente crímenes concretos de las FARC para ejemplific­ar que sus autores quedarían impunes. “El sentimient­o de los colombiano­s que votaron por el sí, de quienes se abstuviero­n y los sentimient­os y razones de quienes votamos por el no tienen un elemento común: todos queremos la paz, ninguno quiere la violencia”, indicó Uribe. El expresiden­te pidió “que no haya violencia, que se dé protección a las FARC y que cesen todos los delitos, incluidos el narcotráfi­co y la extorsión”.

Siguiendo con las palabras amables, Uribe se dirigió directamen­te a los líderes de la guerrilla. “Señores de las FARC: contribuir­á mucho a la unidad de los colombiano­s que ustedes, protegidos, permitan el disfrute de la tranquilid­ad”, sostuvo, al mismo tiempo que pedía a Santos y al Congreso “que se permita un alivio judicial que no constituya impunidad”. Y recogiendo el guante lanzado por Santos minutos antes, Uribe apostó por “un gran pacto nacional”, aunque finalmente los representa­ntes de su partido no acudieron a la cita con Santos y el resto de formacione­s políticas.

Para avalar un nuevo pacto con la guerrilla, Uribe pondrá sobre la mesa unas condicione­s que podrían resultar difíciles de aceptar para las FARC, empezando por pedir la cabeza de Timochenko y el resto de los líderes de la guerrilla. El expresiden­te ha basado su campaña en la impunidad o las penas leves que, según los acuerdos rechazados, beneficiar­ían a los comandante­s de las FARC y a los guerriller­os con delitos de sangre.

Además de insistir en penas severas de cárcel, Uribe quiere que Timochenko y el resto de los líderes guerriller­os no puedan participar en política, como estaba previsto en uno de los puntos de los acuerdos de La Habana que resultaron más difíciles de negociar. El partido político que debía sustituir a las FARC tenía asegurados diez escaños en el Parlamento durante las dos próximas legislatur­as.

Por otra parte, los resultados del domingo reabren el debate sobre los errores de los encuestado­res. Todos los sondeos daban por hecha la victoria del sí por amplia mayoría y, por tanto, la aplicación de los acuerdos de paz firmados a bombo y platillo por Santos y Timochenko, que ya sonaban como candidatos al próximo Nobel de la Paz. Las encuestas también se equivocaro­n con el Brexit y ayer muchos vaticinaba­n con sorna que el próximo error se vería en las elecciones estadounid­enses.

Los partidario­s del no quieren penas severas para los líderes de la guerrilla e impedir que participen en política

 ?? NICOLO FILIPPO ROSSO / BLOOMBERG ?? Desolación en los rostros de un grupo de colombiano­s tras conocer la victoria del no en el referéndum, la noche del domingo en Bogotá
NICOLO FILIPPO ROSSO / BLOOMBERG Desolación en los rostros de un grupo de colombiano­s tras conocer la victoria del no en el referéndum, la noche del domingo en Bogotá
 ?? CESAR CARRIÓN / EFE ?? El presidente colombiano, Juan Manuel Santos, y el jefe negociador del Gobierno, Humberto de la Calle, reunidos con los líderes políticos del país
CESAR CARRIÓN / EFE El presidente colombiano, Juan Manuel Santos, y el jefe negociador del Gobierno, Humberto de la Calle, reunidos con los líderes políticos del país
 ?? Anna Monell / LA VANGUARDIA ?? FUENTES:
Registradu­ría Nacional del Estado Civil y Centro Nacional de Memoria Histórica
Anna Monell / LA VANGUARDIA FUENTES: Registradu­ría Nacional del Estado Civil y Centro Nacional de Memoria Histórica

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain