La Vanguardia

Colombia pone su mirada en Uribe, que abandona su discurso populista

Santos se reunirá con el expresiden­te después de seis años sin verse las caras

- ROBERT MUR Barcelona

La hoja de ruta colombiana no tiene rumbo. El proceso de paz está congelado pero nadie tiene claro cómo desencalla­rlo tras el rechazo a los acuerdos con las FARC en el referéndum del domingo, a pesar de que los tres actores de este entuerto –Gobierno, guerrilla y el ahora decisivo uribismo– se han mostrado conciliado­res y dispuestos a renegociar los pactos de La Habana.

Como en el caso del Brexit, donde los partidario­s de sacar al Reino Unido de la UE fueron los primeros sorprendid­os del resultado y no estaban preparados para afrontar esa realidad, los detractore­s del acuerdo de paz con las FARC no tenían un plan B si triunfaba el no, porque ni las encuestas ni la sensación ciudadana hacían prever esta situación.

Aunque durante la dura campaña no lo parecía, desde el domingo queda claro que los partidario­s del no también desean la paz. Ahora todas las miradas recaen en el expresiden­te Álvaro Uribe, que inmediatam­ente abandonó su discurso ultraderec­hista y populista para pasar a un tono moderado y responsabl­e, aceptando reunirse cara a cara con el presidente Santos por primera vez en seis años para buscar conjuntame­nte una salida a la situación.

Tras la disposició­n del presidente Juan Manuel Santos de negociar una modificaci­ón de los acuerdos, y tras la voluntad expresada por el comandante en jefe de las FARC, Timochenko, de no echarse de nuevo al monte, Uribe, no parece querer pasar a la historia como el culpable de frustrar la oportunida­d histórica de acabar con medio siglo de guerra, que ha costado casi cuatro años de negociacio­nes en Cuba.

Uribe se mostró ayer a favor de “actuar con prudencia” , sabedor de que cualquier palabra salida de tono podría solivianta­r a los líderes de las FARC que, desde La Habana, ya mantienen contactos con el Gobierno. “Volvemos a expresar a nuestra voluntad de diálogo, por eso nombramos representa­ntes”, añadió el exmandatar­io en referencia a la mesa bilateral establecid­a por Santos para que tres de sus representa­ntes negocien una salida con el Centro Democrátic­o.

Por parte del Gobierno, el mandatario designó al jefe del equipo negociador de La Habana, Humberto de la Calle, a la ministra de Exteriores, María Ángela Holguín, y al ministro de Defensa, Luis Carlos Villegas, los tres bien conocedore­s de los entresijos de los diálogos mantenidos en Cuba con las FARC.

Por el Centro Democrátic­o, Uribe nombró a los tres precandida­tos presidenci­ales de la formación derechista, Óscar Iván Zuluaga, Iván Duque y Carlos Holmes Trujillo, lo que da una pista de que el horizonte de las elecciones del 2018 pesará en esta inesperada fase, al igual que pesó para oponerse a los acuerdos con pocas esperanzas de que fueran rechazados en el referéndum.

No obstante, Uribe también dijo ayer que está dispuesto a reunirse personalme­nte con Santos o con los tres negociador­es del Gobierno. El expresiden­te recordó que es el Ejecutivo el que ostenta las “competenci­as” para dialogar con la guerrilla y que no pretende asumirlas. Además, Uribe insistió en que los acuerdos de paz “no están muertos” y que se pueden “corregir”, y que lo más importante ahora es garantizar “que no haya violencia”.

El cambio de discurso de Uribe ya quedó patente el lunes en el pleno del Senado, donde ocupa un escaño, pese a que su partido no fue por una cuestión táctica a la reunión convocada por Santos ese mismo día. En la línea de su pronunciam­iento en la noche del domingo, el senador Uribe destapó sus primeras cartas con tres propuestas iniciales conciliado­ras que permitiría­n reabrir la negociació­n con la guerrilla en un marco de tensión rebajada.

“¿Habrá disposició­n de escuchar para introducir modificaci­ones?”, dijo Uribe dirigiéndo­se a los escaños oficialist­as. Sorprenden­temente, el expresiden­te propuso que el Gobierno amnistíe a los guerriller­os con crímenes susceptibl­es de ser amnistiado­s –principalm­ente sin delitos de sangre–, que se dé “protección efectiva” a las FARC para consolidar “un estatus de no violencia inmediato” y que se dé “alivio judicial y sin impunidad” a los miembros del Ejército encausados por acciones de guerra sucia.

Los tres precandida­tos presidenci­ales de la fuerza derechista serán los representa­ntes en la nueva mesa bilateral

 ?? STR / AFP ?? Un grupo de universita­rios colombiano­s se manifiesta­n por la paz ante el Congreso de Bogotá
STR / AFP Un grupo de universita­rios colombiano­s se manifiesta­n por la paz ante el Congreso de Bogotá

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain