Gincana de millones
Un millonario anónimo ruso deja sobres con dinero por Magnitogorsk y promete regalar 720.000 euros
Alos 400.000 habitantes de Magnitogorsk, una ciudad industrial de la provincia rusa de Cheliábinsk, en Siberia, les ha tocado una lotería: la que ha organizado un millonario local, que se empeña en mantener el anonimato pero que ha empezado a repartir 50 millones de rublos (720.000 euros).
El rumor de que alguien estaba regalando dinero comenzó a correr la semana pasada en esa ciudad próxima a los Urales. Al principio, en internet nació la sospecha de que se trataba de una campaña publicitaria. Ante esta situación, el desprendido millonario decidió dar la cara, aunque tapada con una máscara.
Según testimonios en las redes sociales, el 14 de octubre hubo vecinos de la ciudad que habían empezado a encontrar sobres con billetes desde 50 hasta 5.000 rublos, y también con los más apreciados billetes verdes americanos, habiendo casos de haber tenido la suerte de encontrar uno con la cara de Benjamin Franklin; es decir, nada menos que 100 dólares. Unos decían que lo habían encontrado en una parada de autobús; otros, que en el tejado de una farmacia o en una papelera en la calle.
Un usuario de la red social VKontakte supuso que se trataba de una acción viral de un proveedor de internet. Y más cuando un usuario llamado Artiom Konvértikov (literalmente, Artiom de los Sobres) se presentó en la red como el autor de la hazaña. Pero los rumores cedieron, que no las dudas, cuando el anónimo benefactor se puso en contacto con el portal local Verstov.Info.
Dijo ser un alto directivo de un empresa local y aseguró que piensa distribuir por Magnitogorsk y sus alrededores 50 millones de rublos hasta fin de año. “En total hay preparados 300.000 sobres. Eso significa que tiene que haber suficiente para cada adulto de la ciudad. En realidad, no todos los sobres llevan dinero, ya que se acabó cuando llenamos 236.000. Los otros 64.000 están vacíos”, aseguró, planteando, tal vez sin quererlo, una gincana en la que ha implicado toda una ciudad.
La iniciativa de este anónimo Ded Moroz (el Papá Noël ruso) ha llegado hasta Moscú. Algunos medios de la capital han puesto a sus redactores a buscar sobres. Los de Komsomólskaya
Pravda no encontraron nada el pasado fin de semana. Pero es que el señor de los sobres ya avisó que no iba a dejar el dinero en plena calle. Habrá que esforzarse más para conseguirlo.
También llegó hasta Moscú la voz del supuesto millonario. Se puso en contacto con la redacción de la emisora de radio Kommersant FM, donde dio algunos detalles más de quién es y qué se propone. Se trata de un hombre de 48 años, y dijo trabajar como directivo en una de las empresas metalúrgicas de la ciudad, donde tiene un sueldo mensual de 2,5 millones de rublos al mes (más de 36.000 euros).
Según él, tiene todo lo que necesita, y con su sueldo ha podido comprarse un selecto piso en la calle Tverskaya, en pleno centro de Moscú, por 85 millones de rublos (1,23 millones de euros). Su convencimiento de que la diferencia de salarios en su empresa era injusta –un trabajador raso cobra sólo 40.000 rublos mensuales (apenas 580 euros)– le llevó a su iniciativa filantrópica. Ha sido dinero “demasiado fácil para llegar a apreciarlo”. Así que distribuirlo en sobres le pareció una forma honrada de regalarlo.
Pero lo más importante en esta historia, sobre todo para saber si se trata de una gincana millonaria o de algún tipo de millonaria maniobra, aún está por ver. Aseguró a los periodistas que no quiere dar su nombre por temor a ser despedido. Sólo saben lo que está haciendo un par de personas, que le ayudan a llenar los sobres con dinero, además de su mujer. Ni siquiera está al tanto su hijo, de 14 años, que conoció lo que estaba ocurriendo por internet y también se ha puesto a buscar el dinero por la calle con sus amigos.
A Magnitogorsk han llegado también grupos de personas que se han organizado para buscar los sobres en equipo. Uno de esos buscadores explicó a la emisora que pertenece a una brigada de ocho miembros y que han dado con 300 sobres en los que había 60.000 rublos (865 euros).
El filántropo dice ser un directivo disconforme con la diferencia de sueldos en su empresa