Japón prevé para el año 2018 la abdicación del emperador Akihito
El Gobierno japonés ya ha empezado a perfilar la hoja de ruta para la abdicación del emperador Akihito y ha fijado un horizonte. Fuentes del Ejecutivo nipón avanzaron ayer que la renuncia de Akihito al trono del Crisantemo, en favor de su hijo Naruhito, se prevé que tenga lugar en el 2018, según el diario Asahi .Un traspaso de poder que es bien visto por el 87% de los japoneses.
El Ejecutivo que lidera el conservador Shinzo Abe ha decidido marcarse la fecha del 2018 con el fin de satisfacer el deseo expresado hace dos meses por el propio Akihito. El pasado 8 de agosto, este monarca de 82 años anunció ante las cámaras su deseo de dar un paso atrás, debido a su estado de salud y a la preocupación de no poder desempeñar su papel como jefe del Estado. Y es que su salud se ha visto debilitada en los últimos años, primero por un cáncer de próstata que sufrió en el 2003, tras el que padeció osteoporosis por efecto de la terapia hormonal que se le prescribió, y luego por la operación coronaria a que fue sometido en el 2012, con la implantación de un bypass.
En su discurso, el emperador sugirió de forma muy sutil, ya que la Constitución le imposibilita dar opiniones políticas, la fecha de su abdicación. Señaló que hacía poco que se habían conmemorado los 70 años del fin de la Segunda Guerra Mundial y que “en dos años vamos a dar la bienvenida al año 30 de la era Heisei [el año 2018]”, dijo el monarca en referencia al periodo de tiempo que lleva reinando. Un mensaje que no pasó desapercibido al Gobierno, según Asahi.
Para agilizar los trámites, Abe ha optado por impulsar una legislación especial que sólo afectaría a Akihito y ha encargado a un grupo de seis expertos que elabore las propuestas para gestionar este proceso de abdicación.
El Gobierno nipón ha elegido esta vía porque la alternativa supondría modificar la Constitución y la ley que regula la Casa Imperial, que sólo prevé la sucesión del emperador en caso de fallecimiento. Unos trámites parlamentarios que podrían prolongarse durante varios años.
Shinzo Abe quiere que todo esté listo en unos pocos meses. Pretende que el grupo de expertos remita sus recomendaciones a finales de año, para poder preparar una propuesta legislativa. Iniciativa que el Gobierno nipón quiere presentar al Parlamento a principios del 2017. Un plan que permitiría preparar con tiempo la abdicación de Akihito, un paso atrás que es aprobado por el 87% de los nipones, según un sondeo de la agencia Kyodo realizado después de que el emperador anunciara su deseo de renunciar al trono del Crisantemo.