Ensenyament rebaja a pelea de patio la paliza a la niña del colegio de Palma
El informe de los inspectores desmiente la versión dada por la familia de la menor
La Conselleria d’Ensenyament de Baleares rebaja la gravedad de la agresión a una niña 8 años ocurrida hace dos semanas en un colegio de Palma y la califica, prácticamente, de incidente de patio de escuela. El informe elaborado por dos inspectores del Govern niega que se trate de un caso de acoso escolar y mantiene que los alumnos implicados no planearon el ataque. De acuerdo con el informe que ayer dio a conocer el responsable autonómico de Educación, los alumnos se pelearon en el patio por una pelota. Según Martí March fue un hecho puntual, sin intencionalidad previa, que acabó con la menor golpeada e ingresada en el hospital mallorquín de Son Espases. Los siete alumnos responsables de la pelea del pasado 5 de octubre han sido expulsados entre 3 y 5 días del centro escolar.
Según las informaciones recogidas por los inspectores, la alumna, que de momento sigue sin regresar el centro, había sufrido una presunta agresión en la que habrían participado alumnos de diferentes cursos en el momento de finalizar el tiempo de patio. Un grupo de alumnos habrían estado jugando a fútbol y la alumna presuntamente agredida recogió la pelota tras sonar el timbre. Un hecho que desencadenó la pelea. Los inspectores sostienen en su informe que, tras los incidentes, la niña continuó las clases con normalidad y que ningún profesor observó algún tipo de secuela física que hiciera evidente que la alumna necesitaba de asistencia médica ni siquiera del botiquín del centro. Sólo mostraba unas pequeñas marcas en el codo y en la pierna, compatibles con la caída al suelo, caída motivada posiblemente por el forcejeo al disputarse la posesión de la pelota que ella tenía aferrada muy intensamente. Además, el informe contradice la versión de la familia de la menor, se apoya en el informe del fiscal y sostiene que en el momento de la trifulca había dos profesores en el patio, como recoge la ley.
El conseller de Ensenyament i Universitat, Martí March, sí ha reconocido que se ha recomendado al colegido de Son Roca en Palma, donde se produjo la agresión, que “aumente el número de profesores de guardia en el patio” y que, además, “se estudiará si generaliza esta recomendación al resto de centros de Baleares”.
Los niños que participaron en la agresión han reconocido los hechos y se han mostrado arrepentidos. Tendrán que participar en actividades dirigidas a trabajar en las normas de juego y respeto a los compañeros. Unos trabajos que serán supervisados por la jefa de estudios y sus tutores de clase. Mientras tanto, la familia ha pedido un cambio de centro aunque, tanto desde el colegio como desde la conselleria, han mostrado su voluntad de que cambien de opinión. Aun así, Ensenyament atenderá la demanda de cambio de la familia si deciden mantener esta solicitud. March también ha adelantado que el Govern investigará el absentismo escolar que ha registrado el centro tras lo acontecido.
El informe ha permitido esclarecer que la agresión fue perpetrada por un grupo de siete compañeros de la víctima y no doce: dos de ocho años, uno de nueve, otro de diez, dos de once y uno de doce.
Los siete escolares que participaron en la agresión reconocen los hechos y serán expulsados de 3 a 5 días