Un Tour para estrategas
La reducción de la contrarreloj y de los finales en alto anuncia un festival de emboscadas
El recorrido de un nuevo Tour de Francia suele dar pie a todas las especulaciones. Permite formar una primera impresión que acabará de concretarse dentro de varios meses, cuando se pase de la cartografía a la realidad del terreno, al calor o la lluvia, a las fuerzas de los participantes y a cuantos aspectos externos puedan surgir. Pero el Tour 2017 ya tiene el decorado plantado y las primeras impresiones sonríen a los escaladores (hay menos contrarreloj), a los atacantes (hay terreno sobrado para armar la marimorena) y, sobre todo, a los buenos estrategas. Pinta un Tour muy táctico –que no es lo mismo que inmovilizado–, con mucha gestión de equipo y constantes oportunidades para dinamitar la carrera. Por primera vez en los últimos 25 años la carrera visitará los cinco grandes macizos franceses, a los tres finales en alto hay que sumar otros cuatro en descenso y las jornadas para la guerra de guerrillas abundan. Un Tour que, sin duda, no ha de ser del agrado de Chris Froome y sí de un Contador o un Quintana... si consiguen reunir un equipo de plenas garantías.
“El trazado es difícil, como todos”, señaló el líder del Sky. “No conozco todos los puertos, no conozco el Izoard, nunca lo he visto”, explicó. En la última edición, con 54,5 kilómetros de contrarreloj acumulada, Froome le sacó más de tres minutos a Quintana. El año próximo tendrá que buscarlos en otro sitio porque el Tour 2017 apenas presenta 36 kilómetros de cronometrada. Arrancará el sábado 1 de julio en Düsseldorf (cuarta salida de Alemania, tras Colonia 1965, Frankfurt 1980 y Berlín, aún con el muro, 1987). Y lo hará con una contrarreloj llana de sólo 13 kilómetros. Luego destaca un primer aperitivo, el 3 de julio con el final en la rampa de la ciudadela de Longwy (1,6 km al 5,8%), y propone el primer final en alto en la quinta etapa: La Planche des Belles Filles, donde se impuso Froome en el 2012 y Nibali en el 2014.
La primera semana de carrera añade otros alicientes como el final del domingo 9 de julio en Chambéry. En el menú del día figuran tres puertos de categoría especial, con descensos muy técnicos, y sobresale el Grand Colombier, por su vertiente más dura y rampas del 22% de desnivel.
La segunda semana de carrera destaca por la etapa reina de Pirineos. Será la duodécima, el jueves 13 de julio. Tocará superar los altos de Menté, Balès y Peyresourde, para culminar en el altipuerto donde se filmaron escenas de El
mañana nunca muere, con James Bond. Otras dos jornadas de tensión especial serán la decimotercera (sólo cien kilómetros en el Ariège, con Latrape, Agnes y el muro de Péguère antes de llegar a Foix) y la decimoquinta, otro trazado rompepiernas esta vez en el Macizo Central.
Los Alpes tomarán protagonismo en la última semana. La decimoséptima etapa, el miércoles 19, incluye La Croix de Fer y el Galibier (vía Télégraphe) antes del descenso hasta Serre-Chevalier, donde en 1993 se impuso Tony Rominger acompañado del colombiano Álvaro Mejía y de Miguel Indurain, en plena exhibición. Y al día siguiente una de las grandes novedades del Tour 2017: final de etapa en el Izoard, uno de los colosos de la carrera, escalado desde 1922 y coronado en cabeza por última vez por Purito Rodríguez en el 2014.
Antes del paseo triunfal por París quedará la contrarreloj de la penúltima etapa, en Marsella, con salida y llegada al nuevo estadio Vélodrome. Son 23 kilómetros llanos con la excepción de la subida a Notre Dame de la Garde, uno de los símbolos marselleses.
La última etapa dará comienzo en Montgeron, donde arrancó el primer Tour en 1903, y en el tramo parisino el pelotón atravesará la nave central del Grand Palais.
Para Alberto Contador (ausente en la presentación) es un Tour “que no me disgusta. Será mi gran objetivo del año próximo”.
MÁS TÁCTICO Reunir un equipo potente será una de las claves para defenderse y atacar en todos los terrenos CHRIS FROOME “El trazado es difícil, como todos los años; hay puertos que no conozco, como el Izoard, nunca lo he visto”