“Ustedes tienen madera”
Los maestros del béisbol de la liga profesional de Estados Unidos ofrecen sus secretos a treinta entrenadores españoles
Roberto Díaz pregunta: –¿Sabía que España acaba de proclamarse subcampeona de Europa de béisbol? –Bueno, algo había oído. Pero bajito y en escorzo –respondo, sonrojado. –Perdimos 3-2 contra Holanda, en su propio país. Pero le dimos mucha guerra, se lo aseguro.
La conversación se desarrolla en el estadio de béisbol de Sant Boi. Se encuentra junto a la comisaría de la policía local y al estadio de atletismo. Díaz no lo ve claro. Y por eso añade: –Hacía 61 años que no jugábamos la final. Al final me rindo: –Vale, no tenía ni idea –confieso. Avergonzado, me entrego a la autocomplacencia: ¿acaso alguien estaba al corriente de eso?, ¿quién sigue a la selección española de béisbol?
–No se equivoque. Aquí hay madera. Su béisbol puede lograr grandes cosas –interviene ahora Eleodoro Arias.
Este hombre, Arias (66), lo mira todo desde las alturas del conocimiento. En el mundo del béisbol es como Guardiola. O como Mourinho. Un técnico esencial.
Durante 28 años, Arias dirigió la academia Campo Las Palmas, una escuela de béisbol situada a 50 kilómetros de Santo Domingo. Lo hizo como enlace externo de Los Angeles Dodgers. Descubría a muchachos, los enrolaba, los formaba y los promocionaba. Por sus manos pasaron pitchers de primera línea. Lanzadores como Juan Guzmán, Pedro Astacio y Pedro Martínez.
En su día, el último, Pedro Martínez fue una estrella de especial magnitud. Fue ocho veces AllStar y ganó un título de las Series Mundiales, el del 2004, con los Red Sox de Boston.
–Martínez era elástico, muy determinado sobre la lomita, no excesivamente corpulento (1,80 m, 77 kilos). De brazo muy veloz. Y tenía instinto –dice Arias.
Luego se da la vuelta y lanza un par de órdenes a los muchachos. La clase no ha acabado. Hay que bucear en las nueve fases del lanzamiento.
Once especialistas de la Major League Baseball (Liga Profesional de Béisbol) han pasado diez días en Barcelona, Castelldefels y Sant Boi. Vinieron a ofrecer parte de sus secretos a un abanico de entrenadores (30 de ellos) y jugadores españoles. Roberto Díaz era el director del programa.
–¿Y quién cubría todo esto? –le pregunto a Díaz.
–La MLB en un 80%. El resto lo poníamos nosotros, la Federación Española. –¿Tanto espera la MLB de nuestro béisbol? –Eso parece.
EL GRAN DESCONOCIDO “¿Sabía que la selección española fue segunda en el Europeo este septiembre?”, pregunta un experto LA VISIÓN DE UN SABIO “Si ya se está jugando a fútbol en el Caribe, ¿por qué no se va a jugar a béisbol aquí?”, dice Eleodoro Arias
–¿Cuántos peloteros hay en España? –Unas 6.000 fichas. Hace tres años eran mil menos. Paradójicamente, la crisis nos ha ayudado. Desde que cayeron los patrocinadores, los clubs han tenido que explotar la cantera. Tienen que sacar niños.
Alfonso González (53) es uno de los entrenadores de los Astros de Valencia. Los últimos campeones de liga. Y un alumno del curso de la MLB. La pregunta: –¿Qué ha aprendido en este curso? –Un montón de secretos. La gente de la MLB nos ha dado un manual de 800 páginas. Y con lo que me han ido explicando he anotado otras diez páginas diarias. Cuáles son las posiciones de equilibrio. Cómo pisar la tabla. Cuáles son los movimientos específicos del pie. Pequeños detalles que disparan el rendimiento de un equipo.
–¿Hay muchos profesionales del béisbol en nuestro país?
–Los jugadores mejor pagados estarán ganando alrededor de 700 euros al mes. Más las primas y la manutención. –No es mucho. –El béisbol es un deporte precioso. El gesto de batear es uno de los más complicados en el mundo del deporte. El tiempo de reacción es minúsculo. Y hay que improvisar un montón de ajustes sobre la marcha. Al bateador, la pelota le llega mucho más rápido que a Rafael Nadal. Puede llegarle curvada, o en parábola, o en caída... El béisbol es un deporte lento. Tienes mucho tiempo para pensar. Pero cuando ocurre algo, se desencadenan un montón de acciones vertiginosas.
Le pregunto a Eleodoro Arias si el béisbol tiene futuro en España.
–Sé que aquí reina el fútbol. Pero eso no importa. En mi país reina el béisbol. Sin embargo, ya hay tres o cuatro escuelas de fútbol. Si nosotros empezamos a dominar el balón, ¿por qué no van a salir buenos peloteros aquí?