La Fiscalía pide 27 años de cárcel para el expresidente de Fórum Filatélico
La Fiscalía Anticorrupción ha solicitado 27 años de prisión para el epresidente de Fórum Filatélico, Francisco Briones, por considerarle autor de los delitos de estafa, insolvencia punible, falseamiento de cuentas y blanqueo de capitales, todo en relación con el negocio construido en torno a las colecciones de sellos, un escándalo que se conoció hace una década. El fiscal sostiene que Fórum desplegó durante años una actividad de captación masiva de fondos que alcanzó los 11.200 millones entre el 2000 y el 2005, mediante la suscripción de unos contratos de inversión filatélica que ofrecían rentabilidades superiores a las de los bancos.
La sociedad aseguraba que los intereses pagados procedían de la revalorización de los sellos asignados por contrato cuando “en realidad los abonaba con las aportaciones de otros clientes dentro de un esquema piramidal que le obligaba a captar nuevos inversores permanentemente”. En este sentido, señala Anticorrupción, Fórum carecía de patrimonio para devolver las aportaciones ya que su mayor activo era una filatelia “libremente” valorada y con precios que incrementaban “sistemáticamente cada trimestre”, a pesar de tener un valor once veces menor al indicado.
Gran parte de estos fondos se empleó “en alimentar su propia maquinaria piramidal” así como en satisfacer las “cuantiosas retribuciones” de sus administradores y directivos; el resto, se destinó a una red de sociedades extranjeras que operaban como proveedores de sellos y que eran utilizadas como soporte para el delito de blanqueo.
La Fiscalía acusa de los mismos delitos que a Briones a otras 28 personas vinculadas a la sociedad, entre ellos el ex director general de la filatélica, Antonio Merino Zamorano, los auditores externos José Carrera Sánchez y Rafael Ruiz Berrio, el consejo de administración y el asesor jurídico. Todos ellos deberán resarcir de forma solidaria con 3.707 millones a los 268.804 titulares de los 393.754 contratos suscritos. Las penas que se solicitan son, en todo caso, más elevadas en el caso de Briones, al ser considerado el líder de toda la organización, “de marcado carácter presidencialista”, y que dejó un desfase patrimonial de 2.848 millones, que los investigadores han tardado más de diez años en acreditar.
La Fiscalía subrayó ayer que todavía sigue en busca y captura uno de los máximos responsables de la red de proveedores, Carlos Llorca, quien “controlaba los complejos circuitos financieros a través de los cuales se desvió al extranjero una gran parte de los fondos captados a los clientes”.