El Vaticano advierte a China sobre los obispos ‘patrióticos’
El portavoz de la Santa Sede, el periodista estadounidense Greg Burke, alertó ayer sobre la ilegalidad de las ordenaciones episcopales realizadas en China sin el mandato del Papa. El Vaticano reaccionó así a las noticias como la de la ordenación como nuevo obispo del sacerdote Paulus Dong Guanhua, en la diócesis de Zhengding, en la provincia de Hebei.
El comunicado de Burke fue muy diplomático en la forma pero firme en el fondo. “La Santa Sede no ha autorizado ninguna ordenación, ni ha sido informada oficialmente de tales acontecimientos –señaló el portavoz–. Si las mencionadas ordenaciones fueran ciertas, constituirían una grave violación de las normas canónicas”. Según Burke, la Santa Sede “confía en que tales noticias sean infundadas”, pero recalcó que no es lícito realizar ordenaciones sin mandato pontificio, “ni siquiera apoyándose en particulares convencimientos personales”.
En China existe una iglesia pseudocatólica controlada por el régimen comunista, la llamada Asociación Patriótica, mientras que la iglesia fiel a Roma opera en semiclandestinidad. Pese a todo, Francisco, como buen jesuita, tiene un gran interés por el país asiático y ha hecho en los últimos años diversas declaraciones de gran respeto por su cultura y sabiduría ancestrales. Uno de los grandes hitos de su pontificado sería normalizar las relaciones con China, interrumpidas en 1949, y realizar una visita.