La Vanguardia

La administra­dora de Gürtel sostiene que “Luis el cabrón” era Bárcenas

Isabel Jordán afirma que no repetiría su relación con Correa “ni harta de vino”

- JOSÉ MARÍA BRUNET Madrid

El juicio del caso Gürtel se ha adentrado ya en las declaracio­nes de los acusados que ocupaban puestos de segundo nivel en la trama. Pero eso no resta interés a sus manifestac­iones. Al contrario, lo incrementa, porque ahora se sienten mucho menos vinculados a sus antiguos jefes. Es el caso de Isabel Jordán, que desempeñó diversas funciones como gestora o administra­dora de sociedades de la red. Siempre, en todo caso, sometida a la autoridad del cabecilla de Gürtel, Francisco Correa, y su número dos, Pablo Crespo.

Al respecto, Jordán aportó ayer una novedad significat­iva a la vista, que puede tener repercusio­nes en la resolución que se dicte en su día sobre las responsabi­lidades que correspond­en a cada uno de los imputados de la red. Esa precisión se refiere al apelativo de “Luis el cabrón”, que aparece en los apuntes de la contabilid­ad B de la red, sin que esté claro a quién se refería tal mención. Según Francisco Correa, “Luis el cabrón” era el empresario Luis Delso.

Esta identifica­ción fue respaldada también por Crespo y por otro personaje de la trama, Álvaro Pérez, conocido a su vez como el Bigotes. Sin embargo, Isabel Jordán corrigió ayer las manifestac­iones de los dos anteriores, y dijo que para ella “Luis el cabrón” siempre fue Bárcenas. No es un dato irrelevant­e, porque el así designado figuraba en dichos términos en la mencionada contabilid­ad paralela de la trama como receptor de fondos. Correa ya explicó que se repartía con Bárcenas las comisiones que pagaban diversas empresas a cambios de contratos con las administra­ciones públicas. Pero el interés de tal lista de nombres es que contiene concrecion­es numéricas.

Por lo demás, las manifestac­iones de Isabel Jordán aportan al jui- cio nuevos detalles sobre la cutrez del caso Gürtel y de los usos y costumbres desarrolla­dos por los principale­s personajes de la trama. Correa, por ejemplo, no se recataba de citar a “Luis el cabrón” usando este apelativo no sólo en sus apuntes, sino también en sus conversaci­ones.

De hecho, si Jordán identificó a Bárcenas como el designado con tal sobrenombr­e es porque el líder de la red le llamó así en el contexto de una conversaci­ón en la que se quejaba de que cada vez le brindaba menos contratos. Isabel Jordán dijo ayer que Correa se quejaba de que Bárcenas estaba asignando encargos del PP a sociedades de la competenci­a.

La que fuera administra­dora de empresas de Gürtel explicó asimismo la práctica de los regalos de la red. Dijo que había entre 200 y 300 beneficiar­ios, entre políticos y gentes que no lo eran. Ella creía que las atenciones eran una simple actuación comercial, que no se trataba de ganar voluntades y contratos de forma ilícita. Los regalos iban de trajes y albornoces a estancias en hoteles, pasando por invitacion­es a spas. En esa época –dijo– no se sabía que esa práctica podía suponer cohecho. Y añadió que ahora no volvería a asumir algunas de las responsabi­lidades que tuvo “ni harta de vino”.

Jordán dice que Correa y Bárcenas se pelearon porque el extesorero del PP contrató a otras empresas

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FERNANDO ALVARADO / EFE Luis Bárcenas, ayer a su llegada a la Audiencia Nacional

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