ATLL, retos tecnológicos en una sociedad 'smart'
El plan director para la renovación del sistema de automatización y telecontrol permite a la compañía implementar la tecnología más adecuada
En una sociedad movida por el motor de la tecnología, ATLL mantiene año tras año un pulso claro por la excelencia en la gestión. Las actuales tendencias socioeconómicas auguran ciudades cada vez mayores; megaciudades cuyos servicios estarán totalmente tecnificados y vinculados entre sí, permitiendo realizar una gestión inteligente de los mismos. El auge de la tecnología y, en especial, la aparición de la IoT (Internet of
Things) afecta y afectará de forma disruptiva a la cotidianidad de las personas y los sistemas productivos de las empresas.
LOS MOTORES DEL CAMBIO
Se pueden identificar, como mínimo, cuatro grandes motores de este cambio continuo: la evolución del mercado tecnológico; la normativa y las leyes regulatorias; las necesidades del servicio; y el proceso de mejora continua. ATLL, como empresa con vocación de liderazgo en el sector de la potabilización y la distribución de agua, y conocedora de esta realidad tecnológica, se ha dotado del Plan director para la renovación del sistema de Automatización y Telecontrol 2017/2022, en el que se recogen los ejes estratégicos que le permitirán responder, de forma ágil y eficiente, a esta situación.
Este proyecto, recientemente abordado, es el camino que ha elegido ATLL para responder a la evolución del mercado tecnológico y así poder implementar la tecnología más adecuada acorde a las necesidades presen-
tes y futuras. ATLL ha puesto énfasis en establecer de forma clara los criterios sobre los que pivote el desarrollo del mismo. Los principales son la interoperabilidad entre todos los elementos del sistema y otros más allá de la propia ATLL –una arquitectura abierta, basada en estándares, que permita el crecimiento, evitando los problemas asociados a tecnologías propietarias–; la optimización de costes, tanto del propio sistema como de los procesos asociados a los servicios prestados; la maximización de la seguridad, para fiabilizar y garantizar la continuidad del sistema; y la apuesta por la sostenibilidad ambiental.
APROVECHAR LA TECNOLOGÍA
Un sistema de red para la conectividad de dispositivos de telecontrol industrial y de sensores ha de facilitar la interoperabilidad, proporcionando un sistema fiable de intercambio y captación de datos. No solamente se deben revisar los protocolos y la arquitectura, sino la propia infraestructura física, para dotar de robustez y fiabilidad a todo el sistema. La consideración de que cada elemento del sistema forma parte de un servicio global permite definir las condiciones de trabajo de todos los puntos de control de ATLL.
Desde los servicios de suministro eléctrico hasta la transformación de los datos en información, se lleva a cabo un análisis minucioso, para identificar los puntos fuertes y los débiles. La fiabilidad de la infraestructura de telecomunicaciones tiene un alto impacto en todo el sistema de telecontrol. Conocedora de ello, ATLL aprovecha lo mejor de las actuales tecnologías, utilizándolas según corresponda para garantizar el acceso a los dispositivos de campo y los sistemas de las plantas productivas.
La red de comunicaciones utiliza distintas tipologías y topologías, según las condiciones de acceso y los requerimientos de servicio. En la actualidad, coexisten redes vSat, 4G, ADSL, Tetra, MPLS, FTTP, LAN Ethernet, industrial Ethernet... Cada una de ellas es una pieza que conforma un todo, aportando diferentes soluciones a cada necesidad. El sistema resultante es capaz de transportar 170.000 seña- les, interconectando más de 4.000 equipos, que cubren todas las funcionalidades, desde la toma del dato en campo, hasta su entrega y procesamiento en los sistemas de negocio.
Los requerimientos que establecen las condiciones de trabajo del sistema Scada –encargado de supervisar, monitorizar y actuar sobre los parámetros de la red de telecontrol– pasan por redefinir un nuevo modelo de Scada, construido sobre las nuevas tendencias tecnológicas: el desarrollo basado en web nativo sobre estándares; la arquitectura unificada de seguridad basada en SSL, auditoría y autenticación de cliente, control en tiempo real con capacidad predictiva de tendencias, arquitectura modular…; y amplios recursos formativos para un mejor conocimiento del entorno y para facilitar el crecimiento y el desarrollo y que su despliegue sea lo más rápido posible.
LOS PROCESOS
Toda innovación tecnológica permite nuevas posibilidades y, por ende, genera la necesidad de revisar la manera de hacer la cosas. Sólo así se podrá aprovechar al máximo. Por este motivo, ATLL incluye en sus líneas estratégicas la redefinición funcional de sus procesos, con el objetivo de aplicar y rentabilizar las mejores prácticas descritas en los estándares internacionales de gestión. Para la compañía, el proceso de gestión de cambios es una pieza clave que permite controlar la evolución de todos y cada uno de los elementos utilizados en su operativa.
El principal objetivo de la gestión de cambios es la evaluación y la planificación del proceso de cambio para asegurar que, en el caso de aplicarse, se haga de la forma más eficiente posible, siguiendo los procedimientos establecidos y asegurando en todo momento la calidad y la continuidad del servicio.
GESTIÓN DE LOS DATOS
Un aspecto esencial en la estrategia corporativa –y, de hecho, el motivo último de la implementación de la tecnología– es disponer de información que sea confiable. Por este motivo, es del todo relevante el control y el aseguramiento del dato. Los objetivos de todo sistema de información son disponer de datos en tiempo real y en los que los usuarios finales pueden confiar; dedicar el tiempo de validación y corrección manual de datos a otras tareas; tomar decisiones adecuadas a partir de datos fiables; y llevar a cabo acciones de manera inmediata, basándose en notificaciones en tiempo real. El desarrollo de dichas prácticas, junto a la realización de auditorias periódicas, permite alcanzar altas cotas de fiabilidad de todo el sistema.
Los datos confiables son el combustible de un buen sistema de ayuda para la toma de decisiones. ATLL, en colaboración con la Universitat de Girona, ha realizado un proyecto para disponer de un sistema experto que, basándose en los datos operacionales generados día a día –y de los cuales se retroalimenta– permitirá, desde los centros de control, tener información estandarizada para ayudar a tomar decisiones operativas. Esta fase se ha centrado en una evaluación conjunta del estado del sistema, y también se ha aprovechado para desarrollar un primer modelo para la mejora del sistema de EDR (Electrodialisis Reversible).
GESTIÓN DE LA SEGURIDAD
Definidos el entorno tecnológico, funcional y de gestión de datos, se hace imprescindible aplicar a todos ellos una política de seguridad acorde a los requerimientos normativos y la criticidad del servicio prestado. La creación de un clima de seguridad y de confianza digital, que permita reforzar la protección de los organismos públicos y privados y estimule la implicación de los usuarios en el entorno digital, es vital para el pleno desarrollo de la sociedad y la economía en un contexto en el que los incidentes son cada vez más frecuentes, complejos y de mayor magnitud. Proteger una empresa no es un proyecto: es un proceso de transformación que afecta a toda la organización.
Está comprobada la necesidad de dedicar amplios esfuerzos a la continua actualización de los sistemas TIC y OT, así como hacer un serio análisis de la afección funcional y la repercusión en las operaciones para maximizar la eficiencia de las mismas. Todo ello con el objetivo de garantizar la calidad y la continuidad de los servicios prestados por ATLL al conjunto de la sociedad.
Los datos 'confiables' son el 'combustible' del sistema de ayuda para tomar decisiones
Proteger una empresa es una transformación que afecta a toda la organización