Castigar a España “sería perverso”
La suspensión de fondos estructurales a España como castigo por haber incumplido sus metas de déficit “tendría efectos económicos perversos”, sería “desmoralizador” y reduciría “su sentimiento europeísta”, aseguró ayer Luis de Guindos, ministro de Economía, en la comisión de asuntos económicos y política regional de la Eurocámara. Guindos jugaba en terreno favorable. La mayoría de sus eurodiputados se opone a la propuesta de congelación de ayudas que prepara la Comisión Europea y pudo explayarse contra sus “reglas simplistas” y defender las buenas cifras de crecimiento de la economía española. La Eurocámara no tiene voto en esta decisión pero ha pedido hacer oír su voz en un procedimiento que ha tomado tintes delirantes. En realidad, tampoco la CE quiere congelar ayudas a España y su plan es acompañar la propuesta de suspensión –que debe presentar por ley– por otra que aconseja no aplicarla ya que el Gobierno ha tomado “medidas efectivas” para corregir el déficit, pero antes debe pasar por el incómodo trámite de escuchar al Parlamento.