Rosario Flores: “Estoy muy sentida y muy flamenquita”
Rosario Rosario cantante, que edita nuevo disco, ‘Gloria a ti”
Rosario Flores, en arte Rosario, acaba de lanzar su nuevo disco, el primero en tres años, Gloria a ti, cuyos temas presentará el 17 de noviembre en el Palau de la Música de Barcelona y el 19 en el auditorio de Girona.
Ha dicho que con este disco busca que la gente la reconozca como es...
En estos tiempos en los que ya está casi todo hecho en cuanto a producciones musicales yo he querido hacer un disco más puro, con palmas y una guitarra y cantando. Salgo con una bata de cola de mi madre en la portada porque quería que la gente viera de dónde vengo y que esa soy yo... Yo tengo muchos ángeles en el cielo y mi consuelo es que no me suelten de la mano... Soy muy espiritual y en el tema que da título al disco hablo de ese luz blanca que te ilumina, que te calma, que te da energía, que nos da buenos consejos y buenos pensamientos.
Hay un tema de homenaje a su madre, Ay mamasota, que termina con su célebre “si me queréis, irse”.
Sí, ja, ja, ja.. Eso fue una genialidad que se le ocurrió a Tomasito, que colaboró conmigo en ese tema. La canción se me ocurrió estando en Bogotá, cuando un fan puso un tuit referido a mí que decía “Ay, mamasota, esa mujer me altera, carajo”. Eso me recordó a mi madre, porque
mamasota se lo dicen allá a las mujeres fuertes, bonitas, con carácter...
Homenajea a su madre, se pone la bata de cola y usa por primera vez el compás de bulerías. ¿Estamos ante su disco más flamenco?
Sí, estoy muy sentida y muy flamenquita, aunque yo he sido siempre flamenca, claro.
¿Hay algo de eso de que a medida que te vas haciendo mayor sientes cada vez más la necesidad
de regresar a las raíces?
Siempre he apreciado mucho mis raíces porque sin ellas no sería ni yo. Venero a mi familia, siempre lo he dicho. Es mi fuente, mi inspiración para la vida y para el arte. Mi hermano Antonio fue el que creó conmigo el estilo Rosario.
Su discográfica la llama la reina del gypsy pop...
No, lo mío es el gypsy funky. Por mi generación he escuchado todo tipo de música, y toda me gusta, pero
en especial soy muy funkera.
¿Qué significa ser gitano y flamenco en el 2016?
Yo sólo puedo hablar por mí. En mi caso es tener un espíritu libre. Y llevar la música y el compás en la sangre, lo que te hace cantar y bailar por amor al arte, sin ninguna vanidad, sin pretender llegar a ser nada..., sino simplemente para llenarte el corazón. Por lo demás, me siento igual que cualquier persona, claro.
Usted siempre ha parecido desbordar vitalidad y optimismo...
Sí, tengo mucha energía. Soy muy nerviosa interiormente y de pequeña me daban ataques de nervios y todo. Y ahora lo entiendo, tenía un exceso de energía y no sabía qué hacer con ella. Es la que vuelco en el escenario. Yo soy carne de escenario. Puedo componer y compongo mis canciones pero soy una artista de escenario; es ahí donde doy mi cien por cien. Y optimista también lo soy, sí. Tengo que serlo porque nací en un hogar muy feliz, con música, con risas, con amor, y la vida ha sido generosa conmigo, me ha regalado muchas cosas, me ha permitido cumplir mi sueño, que era ser artista y dedicarme a la música.
En el disco también recuerda a su hermano fundiendo su voz con la de él en una canción que dejó grabada. Es un tema en el que alude a su problema con las drogas, una lacra que también afectó a
Manolo Tena, que firma con usted la letra de tres canciones. ¿Cree que hay hoy más conciencia sobre ese tema en el mundo de la música y en el del flamenco en particular?
Claro, quien se mete ahora en ese tema sabe a lo que se expone. Hoy hay mucha información. En nuestra época las drogas arrasaron con nuestra generación. Estaban a mano y no había conciencia de lo que provocaban. Yo creo que me salvé por ser unos años más joven, por ver lo que ocurría con los que eran un poco mayores que yo...
Este vez no incluye ninguna versión de temas célebres, algo con lo que ha obtenido grandes éxitos...
Algunas de esas versiones son ya como temas míos. Siempre las incluyo en los conciertos porque a la gente le ha gustado mucho cómo las he interpretado y me las piden.
Su presencia en La voz ha reforzado sin duda su popularidad. Pero ¿hasta qué punto contribuyen los concursos de talentos al mundo musical? y ¿no cree que empieza a haber ya demasiados?
Yo lo veo como una plataforma para que la gente tenga una oportunidad... Yo empecé con La voz de mayores y la verdad es que sufría mucho. Con La voz kids fue otra cosa. Los chavales son más puros y lo ven más como un juego. Con los mayores se sufre porque se lo toman como si les fuera la vida en ello. Yo les decía que no se lo tomaran tan en serio, que aunque ganes posiblemente no te va a cambiar la vida. Para mí la música es otra cosa, no es un espacio de televisión. Un artista es el que te hace sentir, el que te da un mensaje, el que te da un shock y te cambia tu punto de vista.
LA EXPERIENCIA DE ‘LA VOZ’
“Con los mayores sufría mucho; se lo toman como si les fuera la vida en ello”
EL DIRECTO, SU FUERTE “Yo soy carne de escenario; es ahí donde doy mi cien por cien”