México y la región pueden perder los ingresos de las remesas
“A todos nos molesta el muro que quiere construir el loco este ”. Así habla el protagonista del último anuncio de la cerveza mexicana Corona de la agencia Leo Burnett. Pero la campaña publicitaria no tuvo el éxito esperado. “Llegan tiempos muy duros para México”, dijo la analista Gabriela Siller, del banco BASE. “Es el acontecimiento más importante para el país desde la guerra de 1846, cuando las tropas estadounidenses invadieron el país”, comentó José Antonio Crespo, del Centro de Investigación y Docencias Económicas de México. Los temores están justificados. Hace días el Banco Central de México admitió que una victoria de Trump sería “un huracán”. Sobre todo si hace realidad su programa: el nuevo presidente propuso deportar a los inmigrantes ilegales (tachados de “violadores”), tasar las remesas a México un 10% para construir un muro con el país vecino y aplicar aranceles del 35%.
Una de las consecuencias más inmediatas, además de la llegada masiva de cinco millones de mexicanos en busca de un trabajo en su país de origen, sería un aumento de los tipos de interés para sostener la caída del peso, que llegó a a desplomarse más del 11% hasta por debajo de los veinte dólares. México atesora más de 175.000 millones de dólares en reservas en divisas extranjeras. En caso de huida de capitales podría verse obligado a pedir ayuda al FMI, reconoció el banco central.
El 80% de las exportaciones mexicanas van a EE.UU. Firmas norteamericanas como General Motors, FiatChrysler o Ford fabrican en el país. Si Trump saliera del área de libre comercio del TLC, sus negocios se verían afectados. Asimismo, Heineken, Nissan o el BBVA, que obtienen importantes ingresos en México, deberán lidiar con la depreciación del peso.
Claudia Calich, gestora del M&G Emerging Markets Bond Fund, en un informe publicado ayer alertaba de que también Centroamérica podría sufrir las consecuencias, porque dependen mucho de las transferencias de la inmigración ilegal. “En Guatemala, El Salvador y Honduras las remesas no autorizadas procedentes de EE.UU. podrían suponer hasta el 5,6%, el 8% y el 13,2% de sus respectivos PIB, un porcentaje alto si se compara el tamaño de sus economías y de su población”.
El director del Cidob, Jordi Bacaria, recuerda que Trump y Enrique Peña Nieto, el máximo mandatario mexicano, se reunieron durante la campaña electoral, con lo que es posible que hayan pactado algunos escenarios.