Podemos se declara partido autónomo en Andalucía al margen de Iglesias
Teresa Rodríguez aboga por una estructura confederal de la formación morada
ADOLFO S. RUIZ
¿Independencia? Casi. Podemos Andalucía se federaliza y a partir de ahora se constituirá como “una organización autónoma, que tendrá estatutos, CIF y censo propios” y elaborará sus listas electorales sin depender de Madrid. Teresa Rodríguez, reelegida al frente de la formación morada con más del 75% de los votos, comunicó ayer a los medios que “enviaré hoy mismo (por ayer) una carta a Pablo Iglesias” para “notificarle” la novedad.
Rodríguez adujo que esta situación “no corresponde a un capricho, sino que es un mandato asambleario, una petición de más de 17.000 inscritos”, que son los militantes de Podemos que han participado con su voto en el proceso de reorganización interna y elección de la nueva dirección. Un proceso que ha contado con una importante participación y al que optaron tres candidaturas, todas ellas encabezadas por mujeres. La de Rodríguez llevaba el significativo nombre de “Por una marea andaluza”.
El movimiento de Podemos Andalucía no puede haber tomado por sorpresa a la dirección nacional del partido, ya que antes de la votación de las personas se había producido el apoyo a las ideas programáticas. Las tres candidaturas defendían el documento, que Teresa Rodríguez considera como “el más avanzado de los presentados”, en el que se exigía importantes cotas de “autogobierno, autonomía y soberanía para poder sobreponernos a la situación de periferia, de subdesarrollo histórico y de dependencia de Andalucía en el contexto europeo y mundial”.
¿Y en qué se notará esa autonomía de Podemos Andalucía? Para empezar, el cargo de Teresa Rodríguez pasa a denominarse coordinadora general, en lugar de secretaria general, “una terminología que no se corresponde a nuestra cultura política”. Pero hay más, mucho más. Podemos Andalucía diseñará sus estrategias políticas, sus campañas electorales y elegirá a los candilos datos en las elecciones autonómicas o nacionales. Nada de aceptar otra vez el dedazo de Madrid.
En el fondo, se trata de proporcionar a Podemos un barniz más andaluz, que los votantes puedan visualizar una organización más independiente de la políticas impuestas desde el centro. Teresa Rodríguez y su entorno ha llegado a la conclusión de que Podemos no termina de despegar en la comunidad porque los votantes han percibido en ellos “demasiado seguidismo” de Madrid. Es necesario articular, por tanto, una fuerza que pueda aglutinar tanto a los socialistas desengañados con Susana Díaz, como restos del andalucismo político que en los últimos años se habían refugiado, aunque a regañadientes, en el PSOE.
En cuanto al debate entre las tesis de Pablo Iglesias y las de Íñigo Errejón, también presentes en el proceso electoral andaluz, Rodríguez, a la que se ha presentado en la campaña como más cercana al actual secretario general de Podemos, se ha inclinado finalmente por una “síntesis creativa entre las instituciones y la movilización”, de tal manera que la “gente tiene que protagonizar los cambios en las calles” y Podemos ser “el instrumento de esa gente para llevar el cambio a las instituciones”.
A partir de este momento, Podemos Andalucía se propone plantear un modelo productivo propio y alternativo al actual para la comunidad,
La líder andaluza envía una carta a Iglesias para comunicarle su decisión
y llegar a las próximas elecciones autonómicas con un programa “capaz de cambiar la vida de la gente en sentido profundo”.
El próximo fin de semana se celebrará la primera reunión del nuevo Consejo Ciudadano Andaluz que marcará la hoja de ruta a seguir en las próximas semanas. Un Consejo que Teresa Rodríguez domina ampliamente con la presencia de los 27 candidatos que iban en su lista, junto a otros siete que provienen de las dos listas que le disputaron el liderazgo.
La coordinadora general de Podemos Andalucía, según la nueva terminología adoptada, parece haber encajado las críticas recibidas durante su mandato en el sentido de que se ha preocupado más en ser la voz del grupo Anticapitalistas, del que proceden ella y su compañero sentimental, José María González,
Kichi, el actual alcalde de Cádiz, que en representar los intereses de los adscritos a Podemos. Ayer, Rodríguez admitió que se propone encabezar “un liderazgo colectivo, con iguales objetivos y distintas voces y caras”, lo que se interpreta como una llamada de atención a las tentaciones de liderazgo excluyente que pudieran tener otros en el seno de la formación morada, especialmente Pablo Iglesias.