Masella: el mejor esquí nocturno de los Pirineos
LA ESTACIÓN DE LA CERDANYA OFRECE TRECE PISTAS Y SIETE REMONTES MECÁNICOS ILUMINADOS
Esquiar de noche a plena luz del día, o casi. Esta es la gran apuesta de Masella, la estación de esquí de la Cerdanya. El esquí nocturno no es un concepto revolucionario, pero Masella ha ido un paso más allá y propone un dominio esquiable por la noche que ya quisieran para sí sumar otras estaciones durante el día. Nada más y nada menos que 13 pistas y 7 remontes mecánicos iluminados. Un total de 10 kilómetros con un desnivel de 420 metros que permiten esquiar por la noche desde el Pla de Masella (la base de la estación situada a 1.600 m) hasta el sector de La Pleta (en la cota 2.020). A ello hay que sumar un sistema de iluminación que, cuando anochece, en las pistas de Masella da la sensación que se hace de día.
Esquiar de noche es una experiencia única y distinta, pero poder hacerlo en la capital del esquí nocturno de los Pirineos y a sólo dos horas en coche de Barcelona no tiene precio. La oferta gastronómica y el chill out de La Cantina de Masella, situada a pie de pistas, constituyen el colofón perfecto para cerrar una jornada de esquí cuanto menos inolvidable.
Temporadas muy largas
Lejos de conformarse con su fuerte apuesta por el esquí nocturno, Masella se ha armado hasta los dientes, con 558 cañones de última generación, para seguir siendo un referente del esquí diurno. Esta temporada, sólo Masella puede presumir de tener innivado el 100% de los sectores del dominio esquiable y todos sus remontes, con el añadido de ahorrar energía.
Masella es conocida entre el gran público por su calidad de nieve gracias a la orientación norte de sus pistas y a que muchas de ellas discurren entre árboles, y ahora se garantiza una de las temporadas de esquí más longevas de la península Ibérica, desde los primeros fríos de otoño hasta bien entrada la primavera.