Las hijas de Hollywood se alistan como modelos
LA PEQUEÑA DE STEVEN SPIELBERG, EL PROLÍFICO CLAN DE ‘PRIMAS BALDWIN’ Y LOS HERMANOS DYLAN Y HOPPER PENN (SUS PADRES SON SEAN PENN Y ROBIN WRIGHT) SE SUMAN A LA LISTA DE CELEBRIDADES QUE SE INTERESAN POR LA MODA
Primero fueron los hijos de las estrellas del rock. La nueva generación de la rockocracia la denominaban. Y comenzaron a desfilar por la pasarela, las agencias de publicidad y, claro, también por Instagram desde las rubísimas Theodora y Alexandra Richards o las hermanas Jade, Georgia y Elizabeth Jagger a Daisy Lowe o Jethro Cave. Pero ante una demanda que parece infinita (los intereses de la moda han captado también a la descendencia de Beckham, Cindy Crawford o Pamela Anderson), desde hace un par de años la cantera más generosa la aporta el mundo del cine.
Abrió el veto Lily Rose Depp, capaz de triunfar en lo que se proponga, ya sea moda o cine (con la correspondiente preocupación de sus padres, Johnny Deep y Vanessa Paradis, que consideran que su bebé no tiene edad para ser la estrella indiscutible de Karl Lagerfeld y la imagen de Pearl Eyewear de Chanel. Sólo tiene 16 años.
Y a su manera también los sorprendentes hijos de Will y Jada Smith, Jaden y Willow; o las tres hijas de Sylvester Stallone, a quienes hace sólo unos días nombraron miss Globo de Oro 2017. Pero la última en sumarse a la lista de
hijos de que amplían la nueva generación de modelos cotizados ha sido Destry Allen Spielberg.
Esta rubia de ojos azules no necesita presentación. Y tampoco ambición. Cuando decidió explorar su físico espectacular, pero justo para ser modelo (mide sólo 1,70), fichó por la agencia de modelos DT Management, la misma que representa a Paris Hilton y a Ireland y Dylan, las hijas de Alec Baldwin y Sean Penn, respectivamente.
Fruto de la relación entre el dos veces oscarizado (por La lista de
Schindler y Salvar al soldado Ryan) y la actriz Kate Capshaw, Destry Allen Spielverg quiere sacar el máximo rendimiento a sus 19 años y los veinte mil seguidores que ha acumulado en sus cinco años de presencia (e insistencia) en Instagram. Y también exprimir a tope la fuerza de su apellido, pero distanciándose al mismo tiempo del camino que han tomado dos de sus cinco hermanos (entre adoptados y biológicos, Spielberg tiene seis hijos), Theo y Sasha Spielberg, responsables de una banda de indie folk llamada Wardell.
De momento la rubia hija del director que debutó en la vida social recientemente (se la vio en la apertura de la tienda de Ralph Lauren en Beverly Hills y en la cena de Diane von Furstenberg celebrando la llegada del creativo Jonathan Saunders), ha protagonizado su primera sesión de fotos profesional. Ahora falta que le lleguen los primeros contratos.
Quien sí los ha tenido ya, y a través de esa misma agencia, ha sido Dylan Penn. Junto a su hermano Hopper, que trabaja para la agencia Wihelmina, protagoniza la campaña de primavera-verano que pronto lanzará la firma italiana Fay así como el spot que la marca rodó en el desierto californiano de Palm Springs. La campaña de moda fue el debut de los hijos de Sean Penn y Robin Wright en familia (presentaron la campaña de fuerte espíritu motero durante la última semana de la moda de Milán) pero no en el mundo de la notoriedad.
De hecho ella, Dylan Penn, de 25 años, dio sus primeros pasos en la firma Gap, y también ha protagonizado campañas para Asos y Stuart Weitzman, además de haber posado para revistas como
Vogue. Y Hopper Pen, que debe su nombre a Dennis Hopper y a Jack Nicholson, ha aparecido en varios cortos y en vídeos musicales. Pero su obsesión es llegar a la gran pantalla y la moda, dice, “una forma de pagarme las facturas”.
Es la misma actitud que toman Rafferty Law (le llaman simplemente Raff y es el hijo de Jude Law), Gabriel Kane Day-Lewis (de 21 años, hijo del actor Daniel Day-Lewis) y Presley Gerber (de 17 e hijo de Cindy Crawford), que en su día desfilaron en la pasarela masculina de Milán y han vuelto a reunirse para la próxima campa-
ña de primavera-verano que Domenico Dolce y Stefano Gabbana han centrado en la isla de Capri.
Kaia Gerber, hermana de Presley, también prueba suerte en el mundo de la moda y en esta misma lista se puede incluir a Alain Fabian Delon, hijo de Alain Delon, y a Jack Kilmer, hijo de Val Kilmer. Y claro, también a Ireland Baldwin, de 19 años. Aunque hay muchas Baldwin, ella es la más famosa. Hija de Kim Basinger y Alec Baldwin, fichó por la agencia IMG Models en el 2013 y ha ido evolucionando en esta profesión defendiendo siempre “las tallas normales”. Llegó a decir “yo tengo trasero, mi madre tiene un thigh gap”. Unas veces tan rubia como Kim Basinger (la bella protagonista de Nueve semanas y
media) y otras más morena que Hilaria Thomas (la instructora de yoga mallorquina de 32 años con que Alec Baldwin se casó en el 2012), Ireland es tan alta como polémica.
Con 1,88 de estatura y esas curvas que reclama, hace poco más de un año incendió Instagram burlando con poses estratégicas la prohibición de enseñar más piel de la cuenta en las redes sociales pero dejándolo prácticamente todo al descubierto. No hace falta decir que su atrevimiento fue recompensado con miles de
likes en cuestión de segundos. Por lo demás parece que la fama no siempre le sienta bien. Ha estado varias veces ingresada en centros para tratar “golpes emocionales” como el que sufrió al romper con su novia, la rapera Angel Haze. Para recuperarse nada mejor que las otras hijas de los otros Baldwin (además de Alec, Daniel, William y Stephen triunfaron en el cine y la televisión de los ochenta), sus primas Hailey, Alaia y Kahlea. Son unas auténticas it cousin: Hailey tiene 19 años y hace ya un par que desfiló en la London Fashion Week; su hermana mayor Alaia tiene 23 y trabaja como modelo; Kahlea tiene 32 y es realizadora. Dice haber colaborado en los vídeos de Rihanna o Ke$ha.