La educación catalana supera por primera vez la media de la OCDE
Según el informe PISA del 2015, los alumnos de Catalunya mejoran en matemáticas y ciencias, pero retroceden en comprensión lectora
Por primera vez la educación catalana consigue superar la media de los países de la OCDE, si bien en un contexto de caída generalizada de estos. El informe PISA del 2015 revela que la mejora se ha producido en matemáticas y ciencias, pero ha empeorado en lectura. Entre las autonomías españolas, Catalunya se sitúa entre el quinto y el séptimo lugar.
La educación catalana avanza puestos en comparación con el conjunto de países industrializados y por primera vez supera las medias españolas, europeas y mundiales según las mediciones de PISA, que siguen estando encabezadas por Singapur. El último informe PISA 2015, presentado ayer en Londres por Ángel Gurría, director de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), y que evalúa a más de medio millón de estudiantes de 15 años de 72 países y regiones del mundo, indica que los alumnos de Catalunya superan por vez primera la media de la OCDE en las tres áreas de conocimiento analizadas: comprensión lectora, con un indicador de 500 puntos, comprensión matemática (500) y científica (504). Este ascenso se ha producido en un contexto de caída en el conjunto de países analizados ya que, como grupo, la educación en la OCDE, ha bajado entre 3 y 8 puntos en las tres materias.
En todo caso, los estudiantes catalanes también se sitúan por encima de la media de la Unión Europea y de la media española. Sin embargo, pese a estos resultados que mantienen a la comunidad ligeramente por encima de la medianía de países del entorno, quedan lejos de la excelencia alcanzada por Japón, Estonia, Finlandia y Canadá y se colocan en quinto o séptimo puesto en relación con otras comunidades autónomas españolas que también participan en el estudio. Así, como se ve en los gráficos, queda por debajo de autonomías como Navarra, Aragón, Galicia, La Rioja, Cantabria, Madrid y especialmente lejos de Castilla y León. Esta diferencia podría explicarse por la diversidad del alumnado en Catalunya, con un nivel de inmigrantes de habla no hispana superior a las comunidades mencionadas.
En la comparación con los datos que registró Catalunya en el informe PISA de hace tres años, el sistema mejora en ciencias y en matemáticas, pero pincha en comprensión lectora, donde, en un contexto de una caída de 3 puntos de la media de la OCDE, obtiene un punto menos que en el 2012, más alumnos en la franja de los suspendidos y menos estudiantes excelentes.
En conocimiento matemático sube siete puntos, y en el científico asciende doce puntos, un gran avance conseguido sólo por Portugal (la comparación es con los países analizados por la OCDE y no con todas las regiones del mundo) .
“Estamos muy satisfechos con estos datos porque significan que por primera vez superamos en las tres áreas la media de la OCDE”, indicó la consellera de Educació, Meritxell Ruiz, “y nos confirman que las políticas educativas que implementamos basándonos en las reflexiones pedagógicas, y gracias a la estabilidad que nos da una ley que no ha cambiado desde el 2009, mejoran en términos de calidad educativa y equidad”. Explicó que el avance se debe a la introducción del aprendizaje competencial en las escuelas, impulsado por los currículums y evaluaciones externas, que es también la forma de evaluar de PISA.
En cuestión de equidad, medido por el porcentaje de alumnos que no superan las competencias básicas, Catalunya mejora en ciencias y matemáticas, pero sufre un empeoramiento en –de nuevo– comprensión lectora. En el 2009, los rezagados en lectura eran el 13,5% de los alumnos evaluados. En el 2012 fueron el 15% y este año ha crecido el 15,4%. Los más brillantes, en cambio, que en el 2012 eran el 7,3%, ahora se han reducido al 6,2%.
Sin embargo, el esfuerzo en mejorar la equidad ha sido patente en las otras dos materias. En ciencias, se ha pasado del 18,9% de no “aprobados” en el 2012 al 15,7% este año, y en matemáticas, se ha estrechado la banda baja tres puntos pasando al 17,7%, con un aumento de los alumnos brillantes.
Esta mejora, que indica que se avanza en la igualdad de oportunidades, muestra también un fotografía preocupante: entre uno y dos alumnos de cada diez no tienen los conocimientos mínimos exigibles para desenvolverse en la sociedad lo cual es una cifra mejor que la mayoría de países de la OCDE, que es del 20%, pero peor que la de los países líderes en PISA. Igual pasa en la franja de la excelencia, como mucho, un alumno de cada diez alcanza ese nivel en Catalunya. Esta cifra contrasta con los países que encabezan PISA que tienen al menos uno de cada cinco alumnos excelentes y, en algunas economías, hasta la mitad del aula es brillante.
Frente a la creciente desigualdad mundial, el director general de la OCDE recomendó ayer mejorar la calidad de la enseñanza, dar sentido a lo que estudian los alumnos e invertir en profesorado en centros de alta complejidad: “repetir curso no funciona”, indicó Gurría, “lo que funciona y hace elevar a todo el sistema educativo de un país es invertir en los más desfavorecidos”.
PISA ha evaluado este año la competencia científica de forma especial. El país con más puntos es Japón, seguido de Estonia, Finlandia y Canadá, aunque Singapur, como economía regional, supera todas las marcas y Taipei (Taiwán) y Macao (China) se colarían en cuarta y quinta posición si fueran países. Singapur también encabeza lectura y matemáticas, seguida, en esta materia, de Hong Kong, Macao, Taipéi, Japón, Pekín, Shanghai, provincias de Jiangsu y Gandong y Corea del Sur. Sólo en octava posición aparece un país occidental, Suiza.
“Estamos satisfechos porque por primera vez superamos en las tres áreas la media de la OCDE”, señala Ruiz