La temporada de esquí arranca con buena nota
Trasiego de camiones cargados de nieve y cañones a todo gas han permitido a todas las estaciones abrir en la primera fase del puente
Una sola nevada (la de finales de noviembre) ha bastado para que todas las estaciones de alpino del Pirineo catalán hayan podido estrenar temporada en la primera escapada del largo puente de la Constitución y la Inmaculada. Ha sido un arranque sin grandes multitudes (el grueso de visitantes se espera a partir de este jueves), pero de nota por el trabajo hecho en esas estaciones para ofrecer, con la nieve justa, las mejores condiciones posibles a sus clientes.
En Baqueira ha vuelto a haber estos últimos días trasiego de camiones para llevar nieve de las cotas más altas a los accesos de las pistas situadas por encima de los mil quinientos metros. Y en prácticamente todos los complejos los cañones de nieve artificial han funcionado todas las horas que el clima ha permitido, para innivar las zonas donde no cayó la nieve natural y aumentar los grosores en aquellas que tienen ya una base por las precipitaciones caídas del cielo.
Los esquiadores que estos días han visitado el Pirineo son plenamente conscientes de todo el esfuerzo hecho por un negocio que hace ya varias temporadas se marca, como uno de sus principa-grosores, les objetivos, estrenar la campaña esta primera semana de diciembre. Lo afirmaba ayer Carlos, un vecino de Valencia que ha pasado tres días en la estación de Boí Taüll con sus tres hijas. “Se nota que el personal de este complejo ha trabajado mucho para satisfacer al cliente, y la verdad es que en las cotas altas la nieve era abundante y de una calidad excepcional”. La estación de la Alta Ribagorça es la que presenta hoy mejor estado en lo que se refiere a con más de un metro y medio de nieve en cotas cercanas a los 2.300 metros. Masella fue también muy afortunada con el temporal de finales de noviembre, que ha permitido a esta estación de la Cerdanya abrir todo el desnivel del complejo, desde la cota más baja hasta la más alta, informa Maite Martí, portavoz de la estación. Este complejo tuvo ayer su punta de visitantes de esta primera fase del puente, con casi 4.700 esquiadores.
En Baqueira Beret la vista desde el área 1.500 puede engañar al esquiador que no conoce bien esa estación. En esa cota apenas hay nieve, pero a partir de 1.800 la imagen de la estación es muy diferente. Xabier Ubeira, director comercial del complejo aranés, indica que han podido abrir en las cotas más altas 77 kilómetros de pistas. Las áreas de la Bonaigua, Argulls y la Peülla son las que mejores condiciones presentan para la práctica del esquí. En esta estación han tenido una media de entre 4.000 y 5.000 esquiadores diarios desde el pasado sábado.
Ferrocarrils de la Generalitat, propietaria de La Molina, Espot Esquí y Port Ainé, se muestra también satisfecha por el buen arranque de la temporada a pesar de la escasez de nieve. La intención, si las temperaturas se mantienen de noche por debajo de los cero grados, es seguir abriendo pistas los próximos días conforme se vaya fabricando nieve con los cañones. Y es que sin toda esa infraestructura de innivación artificial la mayoría de las estaciones del Pirineo no habrían podido abrir sus pistas esta primera semana de diciembre por mucho empeño que pongan. Un año más, estos complejos han demostrado su capacidad para arrancar, con una sola y moderada nevada, toda la maquinaria del esquí en cuestión de horas.
Pasada esta semana las estaciones seguirán trabajando a destajo para garantizar, aunque sea con la nieve tan justa que ahora tienen, la calidad de sus instalaciones de cara a las fiestas de Navidad. Aunque la esperanza es que la próxima semana llegue también ayuda del cielo con alguna borrasca
En Baqueira Beret y Masella han tenido puntas de casi 5.000 esquiadores en una sola jornada