La capital catalana recibe más de 4.000 solicitudes de ayudas para el IBI
El Ayuntamiento de Barcelona está tramitando 4.442 solicitudes para la nueva ayuda que subvenciona el 50% del impuesto sobre bienes inmuebles (IBI) hasta un máximo de 175 euros a personas con pocos recursos, ya sean propietarias o inquilinas, si la cuota se les repercute en los recibos del alquiler. Estas solicitudes podrán beneficiar a unas 15.000 personas ya en este año si se conceden –todavía no se ha resuelto si se denegará alguna por no cumplir los requisitos–, según han explicado fuentes municipales.
El número de solicitudes de ayuda queda por debajo del que el gobierno de Ada Colau había previsto con esta convocatoria extraordinaria. Con la nueva medida, el Ayuntamiento de Barcelona pretendía poder beneficiar a unas 20.000 familias. Por ello había hecho reserva de 3,5 millones de euros, según explicó el primer teniente de alcalde, Gerardo Pisarello, cuando se abrió el plazo de solicitud de un mes el pasado octubre. Con todo, el Ayuntamiento está “satisfecho” de haber alcanzado esta cifra en el primer año en que pone en marcha esta ayuda, que se podía reclamar sólo durante el plazo de un mes (del 5 de octubre al 4 de noviembre) por exigencias del calendario de la aprobación de la modificación presupuestaria.
Los distritos en los que se han registrado más solicitudes han sido los de Nou Barris, Sant Martí y Sants-Montjuïc. La media de personas empadronadas por inmueble de los que han solicitado la ayuda es de 3,3 por vivienda. La mayoría de estas peticiones (4.280) se han tramitado a través de las oficinas de atención al ciudadano, mientras que el resto se ha solicitado telemáticamente o a través de otros registros, como Correos.
La previsión del gobierno de Ada Colau es mantener estas ayudas en función de la renta. Ahora evaluará si incrementa el tope de ingresos para poder beneficiar a más familias y la posibilidad de avanzar el pago para que se realice antes de que se deba pagar el impuesto de bienes inmuebles.
Después de esta primera experiencia, el gobierno municipal confía en que los ciudadanos se familiaricen con esta subvención de cara al próximo año.
La medida ha ido dirigida también a familias con uno o más perceptores de pensiones no contributivas, subsidios de paro, renta mínima de inserción o que hubiesen agotado las prestaciones y, en general, a colectivos que habitualmente no pueden beneficiarse de exenciones y bonificaciones fiscales.