El Gobierno rescata ahora la gestora del túnel de El Pertús
La empresa reclama 450 millones de euros, que se repartirán entre España y Francia
La concesionaria del túnel ferroviario de El Pertús, que enlaza Figueres con Perpiñán, pasará a ser una empresa gestionada por España y Francia tras el rescate de la firma. El coste de esta nueva operación será de unos 450 millones de euros.
La anunciada caída de TP Ferro pasó ayer por el Consejo de Ministros. El gabinete que preside Mariano Rajoy acordó la rescisión del contrato con la concesionaria, que construyó y hasta ahora ha explotado el tramo ferroviario internacional de alta velocidad que enlaza Figueres con Perpiñán y que incluye el túnel bajo los Pirineos de El Pertús. La citada empresa se encuentra en liquidación y ahora son los dos estados, España y Francia, los que asumen la gestión de esta infraestructura. La finalización anticipada de la concesión supone el pago de una compensación a la compañía que podría ser de hasta 450 millones de euros y que servirá para saldar parte de su deuda, que asciende a 560 millones.
Este rescate, expresión que no gusta en el Ministerio de Fomento que su utilice para este tipo de operación, que se produce como consecuencia de una decisión judicial y no política, aunque en la práctica viene a ser lo mismo, se lleva a cabo para asegurar que esta infraestructura, poco utilizada pero, aun así estratégica, continúa en servicio. “Tranquilidad para todos los usuarios de los trenes que circulan por este túnel, dado que seguirá funcionando”, dijo el ministro portavoz, Íñigo Méndez de Vigo, en la rueda de prensa posterior a la reunión del Gobierno.
El siguiente paso es la firma por parte de los gobiernos español y francés de un acuerdo para la asunción conjunta de la línea, que estaba prevista para este lunes, fecha que ayer no fue confirmada oficialmente. De todos modos, esta formalidad debería hacerse en breve. Adif, el administrador de la infraestructura pública de España, y SNCF Réseau, la entidad homóloga de Francia, ya han constituido una sociedad participada a partes iguales, denominada Línea Figueres Perpignan (LFP), a la que se traspasarán todos los activos de TP Ferro y que seguirá explotando este tramo transfronterizo y cobrando el correspondiente peaje a los trenes que circulen por él.
Los artículos 25 y 26 del contrato de la concesión fijan cómo se procederá en caso del fin anticipado del servicio y la consecuente indemnización, si es por causas ajenas a TP Ferro, o no, si se produce por incumplimientos de la compañía. La concesionaria –el administrador concursal, ya que es una sociedad en liquidación– reclamará los 450 millones antes citados en concepto de Responsabilidad Patrimonial de la Administracion (RPA) al entender que realizó de manera correcta su trabajo, tanto en la construcción como en la explotación posterior, y que la no consecución de los ingresos previstos no le es imputable. La cifra corresponde al valor teórico contable de la infraestructura una vez descontado el capital público invertido. Si España y Francia no la aceptan, decidirá el Tribunal Arbitral de la Unión Europea. En este caso, el desenlace puede tardar varios años. De todos modos, la liquidación no llegará para saldar toda la deuda y los accionistas no verán ni un euro. La compensación irá en primer lugar a los acreedores privilegiados, entre los que se encuentran el BBVA, CaixaBank, ING, Novo Banco, Avenue Capital, Bluemountain, Bank of America y Neuberger Berman.
La línea Figueres-Perpiñán, adaptada para el tráfico de viajeros y de mercancías, fue adjudicada en el 2003 a TP Ferro, participada a partes iguales por la constructora española ACS y la francesa Eiffage, por cerca de 1.100 millones de euros. Las obras comenzaron en noviembre del 2004 y finalizaron en febrero del 2009, tal y como se fijó en el contrato. Pero no pudo estrenarse hasta diciembre del 2010, razón por la cual la concesionaria recibió una compensación de 128 millones y un alargamiento del periodo de la concesión, que pasó de 50 a 53 años, hasta el 2057. Pero el tráfico nunca despegó. La empresa tuvo que rehacer sus planes de explotación y, según los últimas cifras dadas a conocer, recibe entre 10 y 16 convoyes de viajeros diarios en vez de los 34 estimados, y cuatro de mercancías, en lugar de los 24 previstos.
EL TRASPASO Adif y SNCF Réseau han constituido una nueva sociedad, LFP, para explotar el tramo LA FACTURA La concesionaria reclamará 450 millones de euros en compensación