Negociar subidas y penalizaciones
Algunos padres creen que fijar una semanada aboca al conflicto cada vez que los hijos pidan una subida. Sin embargo, esos momentos son ocasiones perfectas para potenciar las habilidades negociadoras que los niños necesitan ejercer con amigos, profesores y, en su día, con sus jefes. Comprometerles en una negociación con preguntas como cuánto hace de la última subida, qué nuevos gastos cubrirá con ese dinero o qué previsiones de ahorro tiene pueden ayudar a ello. O se puede vincular la paga a la evolución de los precios. Por otra parte, y también en aras de que resulte formativa, algunos expertos propugnan que se incorporen “cláusulas de penalización”, es decir, que se pacte el impacto que tendrá en la paga si incumplen sus obligaciones domésticas o académicas, o si incurren en determinadas conductas. Se aconseja no suprimir la paga, sino aplicar porcentajes de descuento.