En Navidad,la tradición en la mesa
Las Åestas navideñas evocan como pocas los recuerdos de la infancia. El brillo de los adornos, el olor del muérdago y el musgo, los buenos deseos y las felicitaciones entre los amigos, los vecinos y los conocidos, la musiquilla constante de los villancicos que se escapa de las tiendas e invade las calles
Con el paso del tiempo y los cambios en los estilos de vida, algunas de las tradiciones populares catalanas más arraigadas se han quedado por el camino. Pero si hay un evento que se ha mantenido inalterable en muchos hogares es la comida familiar de Navidad. Un ritual que se repite, año tras año, en el que la familia se reúne alrededor de la mesa, exquisitamente puesta, y comparte el mejor asado del año.
Porque, sin duda, el pollo en alguna de sus variantes y el pavo son los protagonistas de las comidas de Navidad y Año Nuevo, y así lo han sido desde muy antiguo.
Las recetas tradicionales, una apuesta segura
La cocina catalana es rica en formas diferentes de cocinar las aves, pero las recetas más apreciadas para estas Åestas son las que se preparan con el ave entera rellena y con una buena guarnición. Pollos, capones, pulardas y pavos son las variedades más cocinadas.
A la hora de escoger la forma de prepararlos, las recetas tradicionales siempre son garantía de éxito y nos ayudarán a reencontrar los sabores y los olores de la cocina de Navidad. Los rellenos preparados con fruta fresca y frutos secos, y butifarra o panceta son el complemento ideal para la carne Åna de las aves, que liga a la perfección con la dulzura de la fruta. La piel crujiente y brillante le da una gran vistosidad al plato y es el contrapunto perfecto a la textura suave de la carne.
Las aves, de la mejor calidad
La cocina tradicional catalana es, principalmente, una cocina sencilla en sus ingredientes y preparaciones, aunque muchas de nuestras recetas requieren cocciones largas y pausadas. Es por eso que para hacer un buen plato hay que contar con ingredientes de la mejor calidad posible.
Las aves producidas en Catalunya ofrecen una materia prima de altísima calidad, rica en proteínas, con muy poca grasa y que no se somete a ningún tratamiento. Agrupados en la Federación Avícola Catalana (FAC), los productores catalanes ofrecen productos avícolas obtenidos de acuerdo a los estándares de seguridad, calidad, sostenibilidad y bienestar animal de la Unión Europea.
El sector avícola catalán participa activamente en la conservación de la gastronomía catalana como expresión de nuestra cultura. Por este motivo se ha adherido, a través de la FAC, a la iniciativa Catalunya 2016 - Región Europea de la Gastronomía, que tiene por objetivo contribuir a mejorar la calidad de vida de las regiones europeas, conservando las culturas alimentarias y estimulando la innovación gastronómica.