Zombis a la deriva
‘The walking dead’ da signos de agotamiento y pierde 6,5 millones de espectadores en EE.UU. desde octubre
La séptima temporada de The walking dead está dando razón a los que criticaban a la serie insignia de la cadena de cable norteamericana AMC de centrar sus esfuerzos en los cuatro capítulos clave de cada entrega: el inicial, el último antes del paréntesis navideño, el de regreso en febrero y el final. La primera parte de esta temporada, que finalizó hace una semana, ha sido un claro ejemplo de esta estrategia: entre el primero y el octavo capítulo se han intercalado episodios “de relleno” –tal y como se quejan espectadores y críticos televisivos– que en aras de abrir nuevos horizontes y de realizar retratos introspectivos de algunos personajes, sólo consiguen imprimir lentitud y disminuir el interés de los espectadores.
Los datos de audiencia no engañan. Durante el primer tramo de esta temporada se han perdido 6,5 millones de espectadores. El episodio en el que se produjo la muerte de Abraham y Gleen –a manos de Negan y su bate Lucille– obtuvo 17 millones de espectadores en Estados Unidos, y a partir de ahí la audiencia fue bajando hasta los 10,5 millones del octavo episodio, que mejoró ligeramente las cifras de los anteriores, pero que consolida esa tendencia a la baja pese a ser uno de los capítulos clave del curso. Superar los diez millones de espectadores en una cadena de cable sigue siendo una cifra excelente, pero con estas cifras The walking dead inicia una preocupante curva descendente que apunta a un cierto desgaste de la audiencia. Los fans, sin embargo, no deben preocuparse sobre su futuro porque ya tiene asegurada la producción de una octava entrega.
Las razones de este cansancio podrían estar en la cantidad de episodios ya emitidos (91) pero sobre todo a la decepción que ha supuesto la llegada de Negan, el nuevo villano interpretado por Jeffrey Dean Morgan. Aunque su personaje despierta enorme entusiasmo en los seguidores del cómic original, no ha suscitado el mismo interés entre los seguidores de la serie. La crueldad de Negan no ha repercutido en una intensidad de las tramas, sino más bien lo contrario, ya que algunas de sus acciones y actuaciones han bordeado el ridículo.
Los espectadores también han echado de menos a personajes centrales como Rick, Daryl o Carol, a los cuales apenas se les ha visto en esta entrega, quizás por un tema presupuestario. La revista The Hollywood Reporter reveló hace pocas semanas el sueldo que ganan por episodio algunos actores como Andrew Lincoln (Rick), 650.000 dólares (612.000 euros), y Norman Reedus (Daryl), 550.000 dólares (518.000 euros). Los personajes siguen, pero desaparecen en algunos episodios para reducir costes.
Durante esta primera parte de la temporada se han dado a conocer nuevas comunidades y personajes: Tara descubría Oceanside, poblada sólo por mujeres, y Carol llegaba al Reino, donde otro personaje del cómic entraba en escena, Ezekiel. En el último episodio, todos los protagonistas se conjuraban contra Negan. Habrá que ver si con la venganza volverán las audiencias de antañoa The walking dead.