“¿Quique? No entiendo que eso afecte al partido”
Muchas veces se le ha afeado a Luis Enrique que apenas quiere hablar de fútbol con la prensa. Pero ayer parecía que no era tan importante cómo influirán en el Espanyol las bajas de Víctor Sánchez y Léo Baptistão, qué aporta de diferente André Gomes a Rakitic, ya que ambos se disputan una plaza en el centro del campo blaugrana, o la importancia del retorno de Neymar. Sin embargo, esta vez se quería poner el énfasis en su relación y su pasado (en el Madrid) con el entrenador blanquiazul. Se le preguntó directamente, sin embudos, si existe una enemistad manifiesta entre ellos. Pero el asturiano se negó en rotundo a hablar de su vida privada. “No entiendo cómo eso puede afectar al partido. Nada que comentar”, respondió.
Así las cosas no hubo el tradicional encuentro de entrenadores. Quizás Luis Enrique, que debía ejercer de anfitrión al ser local, pudo hacer un poco más para que se hiciese la fotografía y transmitir que la rivalidad tiene que ser sana. “Yo espero que haya buen rollo en el campo y los dos equipos den su mejor versión. Eso es lo realmente importante. No todas las cosas que se puedan hacer en la previa”, justificó su postura el asturiano, convencido de que la rivalidad no se debe llevar al terreno personal.
“Los derbis son partidos especiales para el jugador y para el aficionado, antes y después. Son partidos para disfrutar, sobre todo si los ganas”, explicó esa motivación y pasión que despiertan los duelos con el rival ciudadano. Pero, ojo, sin pasarse de revoluciones. Por un exceso de virilidad y testosterona se corre un riesgo de que suceda como el curso pasado, donde en cuatro duelos hubo 36 amarillas y dos expulsiones. “Espero que todo vaya por los cauces deportivos. Hay que saber controlar las emociones. Esto es un deporte y hay que dar buen ejemplo”, deseó.
Futbolísticamente, el entrenador del Barcelona reconoce que “los dos llegamos en un buen momento” al derbi. “El Espanyol encaja pocos goles, defienden en bloque, deja pocos espacios y tiene jugadores rápidos para salir con peligro al contragolpe”, radiografió al rival. Si los blanquiazules pueden presumir de sus 9 jornadas seguidas sin perder, el Barcelona encadena 8 duelos invicto entre las tres competiciones tras la derrota en Manchester.
Aunque en el Camp Nou, a los blaugrana les está costando encontrar el buen camino y ya han volado 9 de los 21 puntos del Estadi. “No soy Einstein por decir que los números que tenemos en casa no son de aspirante al título. Hay que mejorar”. Quizás por eso, hay un partido del Espanyol en el que Luis Enrique se ha fijado especialmente: el 0-0 que sacó del Calderón. “Imagínate. Lo he vuelto a ver esta mañana”, reveló el técnico tras el entrenamiento de ayer. “El Espanyol prefiere que tengas tú el balón. Será un partido intenso. Sé que jugaremos en campo contrario. Veremos si podemos salvar su repliegue con nuestro juego de posesión. Aunque después igual tenemos un día espléndido”. Como en el 5-0 del pasado mayo.
INCIDENTES DEL CURSO PASADO “Hay que saber controlar las emociones; espero que todo vaya por los cauces deportivos”
LA RIVALIDAD CIUDADANA “Los derbis son partidos especiales, antes y después; son para disfrutar, sobre todo si los ganas”