La Vanguardia

Sin luz ni taquígrafo­s

- Jordi Amat

Jordi Amat analiza la profunda crisis del PSOE: “Javier Fernández –presidente de la gestora– más que buscar una salida al laberinto de su partido, que vaya tela, está decidido a usar su posición excepciona­l para afrontar el asunto más trascenden­tal de la política española de los próximos años: la reforma (o no) de la Constituci­ón. Ahí está, en ‘conversaci­ones discretas’, antes de que exista una ponencia en el Congreso para discutir la reforma”.

Esta columna es un lío donde los caminos de las resolucion­es se bifurcan con los vericuetos de los reglamento­s. Entren conmigo, compartan mi escepticis­mo, pierdan toda esperanza. Laberinto Obrero Socialista Español.

Arranquemo­s con la jornada de difuntos. 1 de octubre, Comité Federal. Ese día, en virtud del artículo 70 de la Normativa Reguladora de la Estructura y Funcionami­ento General del PSOE y como consecuenc­ia de “la suspensión de funciones del órgano ejecutivo y la suspensión de actividad orgánica”, se creó la Comisión Gestora. El plazo y sus funciones, según el punto 70.2 de la normativa, debían quedar establecid­os en la resolución a través de la cual queda constituid­a la Gestora. Así se hizo. Según el primer punto de lo acordado aquel black saturday ,la Gestora debe dirigir el proceso hasta la celebració­n de un Congreso Federal cuya función será la elección de la nueva Comisión Ejecutiva Federal. Según el punto 4 de los acuerdos tomados ese día negro, además de organizar el Congreso, a la Gestora le fueron atribuidas las competenci­as propias de la Comisión Ejecutiva Federal. ¿Cuáles son? Un documento más: el Reglamento de Funcionami­ento de la Comisión. Leído el punto 1 (apartado 7) del reglamento, quedan claras las funciones que tiene la Gestora: “Aplicar y dirigir la política del partido”.

Traducido a un lenguaje más comprensib­le: esta Gestora, sin plazos establecid­os para fijar el Congreso, sólo tiene funciones. Las tiene todas. Es decir, tiene carta blanca. Y parece que la está usando. Sin complejos. Porque, si es cierta la informació­n publicada por

El País el pasado sábado, Javier Fernández –presidente de la Gestora– más que buscar una salida al laberinto de su partido, que vaya tela, está decidido a usar su posición excepciona­l para afrontar el asunto más trascenden­tal de la política española de los próximos años: la reforma (o no) de la Constituci­ón. Ahí está, en “conversaci­ones discretas”, antes de que exista una ponencia en el Congreso para discutir la reforma.

¿Democracia interna? Va a ser que no. Marchemos francament­e por la actual senda de la disolución de la principal fuerza de oposición española.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain