Colau da el pistoletazo de salida a su partido apelando a la “fraternidad”
La alcaldesa preside el primer encuentro del grupo impulsor de los Comunes
Tras fijar las bases ideológicas, la confluencia de izquierdas abordará la cuestión organizativa
El partido que aglutinará a la izquierda soberanista pero no independentista en Catalunya empieza a andar. Ayer se reunió formalmente el grupo encargado de preparar los documentos políticos que marcarán el ideario de la nueva formación, que integrarán BComú, ICV, Podemos y EUiA –más algunos independientes–. El encuentro, más simbólico que efectivo, fue presidido por la alcaldesa de Barcelona y máximo exponente de este espacio, Ada Colau, en la que será la futura sede del partido, en la calle Marina de Barcelona. Pese a que la exportavoz de la PAH no formará parte del grupo promotor, que integran 120 personas, quiso avalar con su presencia el inicio de los trabajos que culminarán en la asamblea fundacional del partido la primera semana de abril.
Los comunes prepararán seis documentos base para definir su ideario económico, nacional, social y cultural que se harán públicos a finales de enero. A partir de entonces los ciudadanos podrán hacer aportaciones a través de una página web (unpaisencomu.cat). Durante el mes de febrero, el grupo promotor celebrará debates por toda Catalunya para presentar su proyecto y recoger sugerencias de la población. Con esta información, se elaborarán las ponencias definitivas que se votarán en la asamblea constituyente del partido, que se celebrará el 1 o el 8 de abril y en la que los comunes esperan congregar a entre 3.000 y 4.000 personas. En un principio, está previsto crear un censo específico de participantes con derecho a voto para la asamblea. Pese a que esta convención marcará el corpus ideológico del partido, los comunes se definen como un espacio “progresista”, “soberanista” –defensor de las múltiples soberanías, insisten, tanto de la nacional como la económica o la medioambiental–. “A favor de decidirlo todo”, señalan en su manifiesto fundacional, pero partidarios de la “fraternidad”. Es decir, que se definen como soberanistas pero no independentistas. Ahora bien, a partir de aquí, tampoco comparten el actual estado de las autonomías, que consideran agotado. Los comunes harán una propuesta sobre qué tipo de nueva relación ha de mantener Catalunya con el resto de España, si bien fuentes de la confluencia de izquierdas señalan que se apostará por un modelo de tipo confederal, que es el propuesto por ICV en sus documentos políticos, por EUiA en su última Asamblea y el defendido por miembros destacados de BComú, como la propia Colau o el portavoz de En Comú Podem en el Congreso, Xavier Domènech. “No daremos ninguna sorpresa, no nos volveremos independentistas de repente”, afirman desde la sala de máquinas de los Comunes.
Xavier Domènech, que se ha postulado para dirigir el nuevo partido, será también el portavoz del grupo promotor. Tras la asamblea fundacional de abril y tras aclarar el ideario político, llegará la fase más complicada, la organizativa, donde se decidirá la forma jurídica del nuevo partido y cómo quedan las cuatro formaciones impulsoras.