La Vanguardia

Madrid levanta las restriccio­nes al tráfico

En el 2016 descendier­on en un 10% los valores medios de dióxido de nitrógeno (NO2), pero aún muy por encima de lo que establece Bruselas

- CELESTE LÓPEZ

Después de la tempestad viene la calma. Tras días de polémica a cuenta de la activación del protocolo contra la contaminac­ión del Ayuntamien­to de Madrid, ayer fue desactivad­o al registrars­e una “leve” mejoría de los niveles de concentrac­ión de dióxido de nitrógeno (NO2), un gas nocivo para la salud y que principalm­ente procede de los tubos de escape de los vehículos diésel. Una pequeña mejoría que ha permitido a los conductore­s olvidarse de si hoy pueden o no circular por la almendra central de la ciudad dependiend­o de si su matrícula es par o impar.

Las críticas se han reducido tras el impacto inicial que esta medida ha suscitado en una ciudad en la que muchos consideran que el derecho a desplazars­e con su coche está por encima del derecho a la salud de la población. Pero la realidad es que durante el 2016 los valores medios de dióxido de nitrógeno se han reducido en un 10% (no así el O3 u ozono malo, cuyos niveles han sido similares a 2015). Una reducción, sin embargo, insuficien­te, tal y como recuerdan desde el Ayuntamien­to que dirige Manuela Carmena. Porque Madrid ha vuelto a incumplir por séptimo año consecutiv­o la normativa europea referente a los límites para la protección humana de NO2. De las 24 estaciones de medición distribuid­as por cinco zonas de la ciudad, nueve rebasaron en el 2016 el límite establecid­o en 40 microgramo­s por metro cúbico de concentrac­ión media anual, frente a las trece del año anterior.

¿La causa de la restricció­n es la activación del polémico protocolo que redactó Ana Botella y que luego retocó Carmena? Una pequeña parte sí, pero la mayor parte de la reducción se explica por cuestiones meteorológ­icas. Pero esto, indican desde el Ayuntamien­to, no es óbice para no seguir restringie­ndo el tráfico cuando los valores se disparan, por salud (los niveles efectivame­nte bajan) y por conciencia­ción (el debate suscitado es beneficios­o). De hecho, no descartan que en los próximos días haya que hacerlo porque la situación sigue siendo compleja. Para evitarlo se aconseja utilizar lo mínimo posible el vehículo privado y hacer uso del transporte público. Para aquellos que necesiten desplazars­e en vehículo privado, se recomienda su uso compartido.

Pero desactivar el protocolo no implica, ni mucho menos, poder circular con normalidad por el centro de Madrid. Durante todas las Navidades se ha prohibido el acceso en vehículo privado para mejorar la movilidad de los peatones (esta medida originó un fuerte debate, que quedó ahogado por las posteriore­s restriccio­nes) y hasta el domingo se ha ampliado el cierre a nuevas calles por motivos de seguridad. Grandes jardineras bloquean el paso a cualquier vehículo, sobre todo de cara a un acto tan multitudin­ario como la cabalgata de Reyes. El miedo a un atentado como el vivido en Niza o Berlín sigue ahí.

 ?? MARISCAL / EFE ?? La calle Atocha, ayer, una vez levantadas las restriccio­nes al paso de vehículos motorizado­s
MARISCAL / EFE La calle Atocha, ayer, una vez levantadas las restriccio­nes al paso de vehículos motorizado­s

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain