Que vuelva Sergio García
El retorno del ariete es la ilusión del españolismo en el ecuador de la Liga
Que Quique Sánchez Flores asegurase ayer que la visita de este medio día del Granada –penúltimo a seis puntos de la salvación– es fundamental y marcará a qué aspira su equipo en lo que queda de temporada no parece decir mucho del proyecto que el Espanyol de Chen Yansheng confió al técnico. Cuando se cumple un año de la compra efectiva de la sociedad, aún escuece la derrota y la imagen del equipo en Mestalla y la Liga alcanza su ecuador, el españolismo ha decidido aferrarse al hipotético retorno de Sergio García, una posibilidad a la que el entrenador quiso dar ayer alas. Para ello tendrá que salir antes Caicedo. Uno de sus agentes estuvo ayer en Sant Adrià. No trajo ninguna oferta y el destino del ecuatoriano, si se acaba yendo, parece lejos de Villarreal.
Caicedo sigue una jornada más fuera de la convocatoria sin un diagnóstico claro: el último es “viriasis”. El míster explicó ayer que seguía débil y no tenía opciones de jugar esta semana. Aunque no ocultó que la opción del jugador es marcharse. “Todos conocéis la situación, se puede ir o se puede quedar, y si se va es porque él decide que será feliz fuera del Espanyol. Daba la sensación que iba a salir ya en verano, no lo hizo y quizá no se quedó con la confianza plena. Es un jugador importante con una mentalidad positiva, pero si no la tiene ya no lo es tanto”. El técnico tampoco quiso cerrar la puerta al retorno de Sergio García, un jugador por quien el club no se interesó el pasado verano. “Conocéis a Sergio García mejor que yo, siempre me ha parecido de los buenos cuando lo he tenido de rival”. Tras un año en Qatar, el catalán volvería si le presentan una oferta, aunque su contrato acaba en junio.
Antes de que se concrete cualquier entrada o salida, el Espanyol tiene hoy un examen al que Sánchez Flores quiso dar trascendencia. “El último partido no nos gustó nada y desde que acabó teníamos muchas ganas de que viniese el siguiente. Fue un error que no debemos repetir y ahora buscamos la rebeldía. Por eso creo que este partido va a marcar lo que queremos ser lo que queda de temporada. Acaba la primera vuelta y nos va a posicionar respecto a lo que queremos y marcará nuestro carácter”, analizó.
La afición ni entendería ni perdonaría un pinchazo ante otro rival de la zona baja, en este caso sin el potencial económico del Valencia, por más que el técnico se esforzase en darle valor. “Es un equipo compacto que se ha encontrado en las últimas jornadas, un equipo difícil que ya ha complicado a grandes de la Liga”.
Aunque ayer pudo recuperar a Piatti y Víctor Sánchez, Quique no dejó de señalar la importancia de las bajas que el equipo ha sufrido en sus últimas citas, empezando por la del propio centrocampista reconvertido en lateral derecho y acabando por la de Baptistão, a quien aún le quedan dos semanas. “Lo que más espero ahora es recuperar a los jugadores que tenemos en la enfermería. Con Víctor deberemos tener precaución, no vamos a arriesgar. Y Baptistão es posible que la semana que viene esté haciendo campo y en dos semanas pueda regresar, aunque ha estado mucho tiempo fuera. Necesita regularidad y tener suerte con las lesiones”.
QUIQUE SÁNCHEZ FLORES
“Sergio García siempre me pareció de los buenos cuando lo tuve de rival”