Davos matiza los efectos del populismo en la economía global
Georges Soros, sobre Donald Trump: “Es un estafador y va a fracasar”
El populismo no es necesariamente malo para la economía mundial. Hasta podría impulsarla, al menos por ahora. Esa es una de las conclusiones que pueden extraerse tras un debate que tuvo lugar ayer, el último día del Foro Económico Mundial, en Davos (Suiza), al que asistieron figuras como Christine Lagarde, directora gerente del Fondo Monetario Internacional; Haruhiko Kuroda, gobernador del Banco de Japón, y Wolfgang Schäuble, ministro de Finanzas de Alemania.
El Brexit y la llegada de Donald Trump a la presidencia de Estados Unidos no frenarán automáticamente el crecimiento si los ciudadanos gastan más y si las promesas de inversiones en infraestructura y recortes regulatorios despiertan la confianza de las empresas, según los participantes en el debate. En momentos en que ya se registra un cambio de tendencia en el ciclo económico, sostuvieron. los mercados desarrollados hasta serían capaces de evitar la trampa del crecimiento bajo, de inflación baja que los tiene contenidos desde la crisis financiera.
Kuroda señaló las mejoras en el sector manufacturero internacional y la recuperación de Asia, y dijo que existe un riesgo alcista en el crecimiento de EE.UU. Schäuble explicó que a la zona euro “le está yendo un poco mejor desde el punto de vista económico y fiscal”, y que su propia economía, la más grande de Europa, está en buenas condiciones. “La economía global parece estar atravesando un momento decisivo”, sostuvo el gobernador del Banco de Japón. A su juicio, “no es casualidad que el crecimiento económico mundial, los precios de las materias primas, las expectativas inflacionarias
Lagarde, el gobernador del Banco de Japón y el ministro alemán de Finanzas creen que el crecimiento seguirá
y las tasas de interés de largo plazo tocasen fondo en la primera mitad del año pasado”.
Incluso Lagarde, que encabezó debates anteriores sobre los temores de quienes dicen que fueron dejados de lado, señaló que el FMI es más optimista. Este mes, el organismo dijo que el crecimiento mundial se acelerará hasta el 3,4% en el 2017 y el 3,6% en el 2018.
“En Davos, tengo la impresión de que la elección de Trump es interpretada como muy positiva en términos económicos”, dijo a la prensa el ministro de Finanzas de Suiza, Ueli Maurer, el viernes. Sin embargo, Lagarde precisó que no queda claro cuál será el equilibrio entre las intenciones de Trump de fomentar el crecimiento y el uso de más políticas proteccionistas. Y si bien en los pasillos del lugar se oían murmullos mayormente de optimismo, algunas voces adoptaron tonos más cautos.
En otro encuentro restringido a periodistas, el magnate George Soros fue afirmó que Trump “es un estafador y va a fracasar”. El financiero estadounidense de origen húngaro subrayó que el presidente estadounidense representa “una forma de gobierno cercana a la dictadura, más parecida a un estado mafioso, lo opuesto a la sociedad abierta” que él ha defendido toda la vida.
Soros, quien apoyó a la demócrata Hillary Clinton durante la última campaña electoral en Estados Unidos, dijo que piensa mantenerse “lo mas lejos posible de Trump” y, en este sentido, recomendó a los empresarios y financieros de todo el mundo que “hagan lo mismo”.