Viaje virtual, viaje real
Los Reyes inauguraron el miércoles la feria turística Fitur, donde de modo virtual recorrieron medio mundo y media España. Vestida cual gaucha, seguramente como homenaje a Argentina, el país invitado de esta feria como lo será de Arco, la reina Letizia admitió en uno de los pabellones que le gustaban todos los destinos de España aunque apostilló: “Soy asturiana”, lo que viene a revelar su predilección por el Principado de Asturias. La realidad es que no se tienen noticias de los lugares que frecuenta la Reina en sus vacaciones, más allá de su estancia mínima en Mallorca y el día que, con motivo de la entrega de los premios Princesa de Asturias, pasa en un pueblo asturiano. Los planes de la Zarzuela para que los Reyes, más allá de los actos institucionales, recorran España sin más motivo que el de mantener contacto con la gente están, de momento, paralizados y más aún el proyecto de que durante su tiempo libre, en vacaciones o fines de semana, eligieran diferentes enclaves turísticos para promocionar parajes conocidos o descubrir lugares dignos de ser visitados.
MIEDO ESCÉNICO
El último sábado de octubre, coincidiendo con el viaje del Rey a Colombia para asistir a la Cumbre Iberoamericana y con motivo del cumpleaños de la princesa Leonor, la reina Letizia decidió llevar a sus hijas al Museo del Prado. A las puertas del recinto, rondaban un par de paparazzi a la búsqueda de algún personaje que llevarse al coleto cuando vieron a dos niñas que advertían a su madre de la presencia de fotógrafos al tiempo que se tapaban la cara, una con la gorra y la otra con el cuello del jersey. Las niñas eran Leonor y Sofía y la madre, la Reina. Que la princesa y la infanta actuaran de ese modo solo se explica si alguien les ha advertido en ese sentido. Bien, podría ser un acto reflejo de protección pero resulta que esas mismas niñas fueron testigos directos el pasado 6 de enero de cómo un familiar que algunos identifican como su tía Telma se agachó en el asiento de atrás del coche que conducía el Rey y en el que viajaba la Reina. Como no hay dos sin tres, ahora nos enteramos, gracias a la revista ¡Hola! , de que la infanta Sofía acudió al Teatro Real de Madrid con su abuela Paloma Rocasolano para ver una función de ballet y que ambas entraron y salieron por la puerta de atrás para no ser vistas. Sin comentarios.
ADIÓS A LORD SNOWDON
Ha muerto Antony Armstrong-Jones, más conocido como lord Snowdon, el título que le concedió la reina Isabel tras su boda con la princesa Margarita. Su fallecimiento, a los 86 años, ha pasado prácticamente desapercibido pero su llegada a la familia real británica en 1960 fue todo un acontecimiento. A la princesa Margarita le costó cinco años superar su ruptura con el capitán Peter Townsend, el ayudante militar de su padre, Jorge VI, de quien estuvo enamorada desde los 13 años, y a quien fue obligada a renunciar por su hermana y por su madre que no querían repetir el modelo de Eduardo VIII que renunció a sus derechos para casarse con Wallis Simpson. Margarita pasó del amor romántico por Townsend a los amoríos más inconvenientes y, al final, se casó con Tony Armstrong, un fotógrafo de buena familia que le dio dos hijos y muchos disgustos. Cuentan que Isabel II se arrepintió de haber impedido la boda de su hermana con Townsend al comprobar lo desgraciada que fue con Tony. La princesa Margarita se divorció, volvió a los amoríos inconvenientes y nunca fue feliz. Lord Snowdon que fue personaje clave en los años sesenta, fue desapareciendo del mapa.