Trece años esperando la descontaminación
2004. Un estudio del CSIC, adelantado por La Vanguardia, revela que bajo el embalse de Flix se han vertido durante casi un siglo 800.000 metros cúbicos de lodos con residuos tóxicos.
2005. El Gobierno central declara la descontaminación de Flix “actuación prioritaria y urgente” (Ley 11/2005 de 22 de junio).
2006. Se inicia la prueba piloto con la extracción de las primeras 350 toneladas de fangos.
2007. El Ministerio de Medio Ambiente licita las obras de descontaminación del pantano, en el Ebro, presupuestadas en 155 millones de euros.
2010. Acuamed empieza, a través de la empresa adjudicataria, la constructora FCC, los trabajos previos a la extracción de los lodos tóxicos. Medio Ambiente había asegurado que la limpieza se iniciaría en el 2008.
2013. Inicio de la extracción de los vertidos acumulados en el fondo del embalse. El Ministerio de Medio Ambiente se compromete a ejecutar las obras de limpieza en 32 meses y finalizar así la descontaminación en diciembre del 2015.
2015. Acuamed anuncia a finales de año el final de la extracción de todos los fangos contaminados, cumpliendo así, supuestamente, los plazos previstos. Lo vende como “éxito total”.
2016. A finales del pasado año, el Ayuntamiento de Flix y la Generalitat denuncian que Acuamed ha dejado 100.000 metros cúbicos de lodos contaminados en el fondo del pantano. Se habla de fraude.
2017. El Ministerio de Medio Ambiente reconoce oficialmente que quedan casi 79.000 m3 de fangos tóxicos en el embalse y anuncia que antes del 2019 se habrán retirado.