El último en la Luna
EUGENE CERNAN (1934-2017) Astronauta estadounidense
Nos vamos como vinimos y, si Dios quiere, como volveremos, en paz y esperanza para toda la humanidad”. Estas fueron, hasta día de hoy, las últimas palabras que se pronunciaron en suelo lunar en la última misión espacial tripulada en nuestro satélite, en 1972. Las pronunció el oficial de la Armada de EE.UU. Eugene Cernan, el último astronauta que pisó la Luna. Falleció el 16 de enero en Houston a los 82 años.
Hijo de un trabajador de astilleros, nació en Chicago en 1934. Estudió ingeniería eléctrica y aeronáutica y entró en la Armada como piloto de cazas. Sumó más de 5.000 horas de vuelo y realizó más de 200 aterrizajes en portaaviones antes de empezar a trabajar para la NASA, en 1963. Entró en el programa Apolo, nombre en clave de las misiones espaciales creadas por el presidente Kennedy para llegar a la Luna antes que los soviéticos, y su primera misión fue en 1966, al lado del coronel Thomas Stafford, en un vuelo orbital alrededor de la Tierra. Dieron la vuelta al globo dos veces e hicieron un paseo espacial. Con esa misión, Cernan se convirtió en el astronauta más joven en salir al espacio: tenía 32 años.
Su segunda misión espacial sentó las bases de la que sería la definitiva para pisar la Luna. Subió al Apolo 10 con Stafford y el comandante John Young para hacer un ensayo general de lo que tendría que hacer el Apolo 11 de Armstrong y Aldrin para poder conquistar el satélite. El plan consistía en volar hasta la órbita lunar, hacer las maniobras de aterrizaje y volver a la Tierra sin tocar suelo. La misión estuvo cerca de convertirse en tragedia, ya que cuando orbitaban cerca del satélite los sistemas de guiado se descontrolaron y la nave estuvo girando sin control hasta que los astronautas lograron retomar el control. La misión del Apolo 10 fue un éxito y, gracias a las maniobras de aterrizaje de Cernan y las fotografías tomadas del suelo lunar desde la nave, también lo fue la del Apolo 11.
Su última misión con la NASA fue en diciembre de 1972, con el Apolo 17, junto al geólogo Harrison Schmitt y el piloto Ronald Evans. El plan consistía en aterrizar en la Luna, instalar unos aparatos de medición, tomar fotografías de la superficie, muestras de minerales y suelo lunar y volver a la Tierra. Pese a no tener la cobertura que tuvieron Armstrong y Aldrin en el Apolo 11, la misión batió muchos récords: fue la estancia lunar más larga (más de 300 horas) recogieron más de 110 kg de material, estuvieron 22 horas fuera del módulo y Schmitt permaneció en el satélite más de tres días. Tras esa operación se dio por cerrado el proyecto Apolo y la carrera espacial de Cernan, que dejó la NASA para trabajar en la petrolera Coral Petroleum. En 1981 creó una consultora en energía y tecnología aeroespacial.
En 1999 publicó su autobiografía, The last man on the moon .En el 2011, junto con Neil Armstrong criticó a la Administración Obama por cancelar el programa de la NASA de volver a la Luna. Siempre fue un defensor de la carrera espacial y la inversión en formación e instrucción de astronautas.
En ese viaje lunar en 1972, antes de volver al cohete Cernan hizo un discurso pensando en el futuro y la esperanza: “Soy Gene, estoy en la superficie, y como doy el último paso del hombre en este suelo, de vuelta a casa por algún tiempo, simplemente me gustaría decir algo para la historia. Este desafío estadounidense de hoy ha forjado el destino del hombre del mañana. Y, al salir de la Luna, nos vamos como vinimos y, si Dios quiere, como volveremos, con paz y esperanza para toda la humanidad. Que Dios acompañe a la tripulación del Apolo 17”.