Los tractores toman Barcelona
Los sindicatos agrarios movilizan cerca de 600 tractores para reclamar la viabilidad de la actividad rural
Más de medio millar de tractores circularon ayer por las calles de Barcelona en la jornada que culmina la Marxa Pagesa, una caravana reivindicativa que ha transitado durante tres días por las carreteras catalanas hasta culminar ayer en la capital. El ruido de motor diésel al ralentí y el olor a aceite de tractor se adueñaron ayer por la mañana de la avenida Maria Cristina de Barcelona, donde 575 tractores desbordaron las previsiones de la organización y obligaron a la Guardia Urbana a reubicar a dos centenares de vehículos a las faldas de Montjuïc.
Además de líderes agrarios y sindicales, recibieron la caravana la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, junto al teniente de Alcalde Gerardo Pisarello. “Bienvenida, #marxapagesa! Barcelona os necesita para garantizar la soberanía alimentaria. Queremos producto de proximidad. ¡Vivan los agricultores!”, escribió Colau en su Twitter a modo de bienvenida.
Según fuentes municipales, en la marcha por las calles de la ciudad participaron 575 tractores, unas 3.000 personas y 30 autocares, y no se produjeron más incidencias que la afectación del tráfico prevista y la reubicación en los aledaños de la avenida Maria Cristina de los vehículos que excedían la superficie reservada para la concentración.
Convocados por el sindicato Unió de Pagesos (UP), la marcha de tractores que arrancó el pasado jueves de hasta 18 puntos de origen de todo el territorio culminó en un acto final en el que el activista e histórico dirigente del sindicato agrario Pep Riera leyó un manifiesto junto a la alcaldesa Colau y Gerardo Pisarello. Por su parte, el coordinador nacional de UP, Joan Caball, aseguró que “es necesario gestionar urgentemente la fauna salvaje porque la sociedad debe decidir qué quiere para su territorio”, así como la administración debe “hacer cuadrar a la gran distribución”.
Unió de Pagesos ha movilizado a los agricultores catalanes para que la población reconozca la actividad agraria como pilar de la sociedad del bienestar y para “renovar el contrato de la agricultura y la ganadería con la sociedad”, además de para “democratizar” el sector y reivindicar más ayudas públicas. Para el sindicato, el principal responsable del empobrecimiento del sector agrícola es la Política Agraria Común (PAC), que “ha dejado de sostener eficazmente lo precios de origen, atenazada por la liberalización desleal en el acceso al mercado interior de la Unión Europea y los oligopolios agroindustriales y comerciales”.
El manifiesto de UP pide al Govern que establezca mediante decretos ley los mecanismos para asegurar el equilibrio en el comercio y la distribución de los productos agroalimentarios “de manera urgente”.
El detonante de la protesta de tres días por toda Catalunya ha sido la reducción, por parte del Govern, de las ayudas de apoyo a la actividad agraria en zonas desfavorecidas de alta montaña, además de la introducción de especies como los buitres o los osos cerca de las explotaciones de las que viven estos agricultores y ganaderos.
Unió de Pagesos recuerda que la estructura agraria de Catalunya es básicamente de agricultura familiar. Según los datos del Institut d’Estadística de Catalunya del 2013, de 59.097 explotaciones, 52.823 cuentan con mano de obra de los familiares, con un total de 93.289 personas. Se trata mayoritariamente de explotaciones de pequeña y mediana dimensión. Unió de Pagesos asegura que la renta agraria acumula una caída del 39% entre los años 2001 y el 2015. En los veinte años transcurridos entre 1993 y 2013 se perdieron 21.477 explotaciones familiares en Catalunya. El sector productor facturó 4.310 millones de euros en el 2015.
La Marxa desbordó las previsiones y un centenar de tractores fueron reubicados en las faldas de Montjuïc UP pide al Govern que cuadre a la distribución y recuerda la pérdida del 39% de la renta agraria desde el 2001