Puigdemont avisa al Gobierno del PP que el tiempo se acaba
El PDECat blinda la dirección y modificará las incompatibilidades
“La consecuencia de dejar pasar el tiempo es que este se acaba”, avisó ayer al Gobierno español el president Carles Puigdemont. Reforzado tras el aval de la CUP a los presupuestos de la Generalitat, Puigdemont compareció ante los cuadros de su partido para señalar que el próximo 6 de febrero, fecha del inicio del juicio oral contra el expresident Artur Mas, y las exconselleres Irene Rigau y Joana Ortega por el 9-N, “comienza el tiempo de descuento para el Estado”. Y es que la aprobación de las cuentas despejará el camino hacia el referéndum.
En el consejo nacional del PDECat celebrado en Barcelona, Puigdemont llamó a las bases soberanistas a convertir el 6 de febrero en el punto de no retorno. “Todos nos tenemos que sentir juzgados y entender que la democracia es cosa de todos y exige activismo y que la practiquemos cada día”, afirmó. Y por ello, emplazó a la ciudadanía a hacer evidente su apoyo a los encausados en las calles porque, según dijo, “el Estado debe notar el aliento de los catalanes en esta recta final”.
El president fue contundente en su crítica al Gobierno que preside Mariano Rajoy, al que acusó de cometer “el grave error de querer dialogar en los juzgados en vez de hacerlo en la política”. Y de orquestar una operación diálogo cuyo mayor ejemplo, a su entender, se verá de nuevo en los juzgados, mientras que “lo único que hay sobre la mesa son expedientes judiciales, dossieres falsos y fondos reservados para engordar las cloacas del Estado”. También recriminó a Rajoy que, tras la sentencia “infame” del Tribunal Constitucional “en contra” del Estatut de Catalunya, creyera que el conflicto se arreglaría “dejando pasar el tiempo sin hacer nada”. A lo que añadió con ironía, “hoy tienen una mala noticia, porque los presupuestos se aprobarán”.
No hubo ninguna referencia a la CUP, ni al ya exsenador Santi Vidal, ni a la dudosa decisión de su partido de saltarse una normativa sobre incompatibilidades aprobada el julio pasado. Y es que el consejo nacional del PDECat frenó por mayoría la dimisión de cuatro miembros de la dirección para cumplir con el régimen de incompatibilidades. Fuentes del partido explicaron que cuando la coordinadora general de partido, Marta Pascal, explicó la intención de los cuatro miembros de dejar su responsabilidad en la cúpula, se abrió un debate en el que finalmente se acordó que siguieran formando parte de la dirección. Así, podrán seguir en sus responsabilidades el diputado y alcalde de Valls, Albert Batet; el diputado y alcalde de Besalú, Lluís Guinó; la diputada y alcaldesa de Calella, Monserrat Candini, y la directora de Cooperación Interdepartamental del Govern, Elsa Artadi. Para ello, se seguirá el trámite establecido en los estatutos del partido, y los cuatro pedirán un informe a la Comisión de Calidad Democrática, que preside el exalcalde de Barcelona Xavier Trias, para que valide esta excepción al régimen de incompatibilidades, y será ratificado en el próximo consejo nacional. Las incompatibilidades fueron una de las cuestiones más espinosas del cónclave de julio, en el que se dio carpetazo a Convergència, y ayer se adquirió el compromiso de modificarlo más adelante.
Durante el consejo también se presentó la campaña que el partido realizará en los próximos días en apoyo del expresident Mas y las exconselleres Ortega y Rigau, que incluye un vídeo y una web.
El president pide que se salga a la calle el 6 de febrero para que “el Estado note el aliento de los catalanes en esta recta final”