El juez inicia la liquidación de Fotoprix tras un embargo de la Seguridad Social
Manuel Ruiz de Lara, titular del juzgado mercantil 10 de Barcelona, ha abierto la liquidación de Fotoprix, cadena de tiendas de fotografía, después de que lo solicitara la propia empresa hace unos días. La compañía, controlada por su fundador, Porfirio González, dejó atrás el concurso de acreedores a finales del año pasado, pero no ha podido siquiera cumplir con el primer plazo del plan de pagos. “Pedimos un aplazamiento a la Seguridad Social, pero nos respondieron con una orden de embargo de todo el dinero que entraba por las ventas on line y el pago por tarjeta de crédito”, explicó ayer González. Ante esta situación, en la que sólo podía retener el 25% de los ingresos, Fotoprix ha tirado la toalla.
La liquidación, a la espera del plan que presente Antonio Herrero, el administrador concursal, pasará presumiblemente por la venta de la unidad productiva a través de una subasta judicial. Fotoprix mantiene 150 trabajadores en plantilla, unas 60 tiendas propias y otras 60 franquiciadas. “El negocio se ha adaptado a la nueva realidad del sector y es perfectamente viable sin deudas y con el socio adecuado”, dijo ayer su fundador. González asegura que varias multinacionales extranjeras se han acercado a la empresa en los últimos meses.