La Vanguardia

Calor inteligent­e

Llega a España Nest, un regulador que aprende los hábitos de los inquilinos del hogar para ahorrar en calefacció­n

- FRANCESC BRACERO Barcelona

La matriz de Google comerciali­zará un termostato inteligent­e, que aprende de las costumbres de los inquilinos para ahorrar en las facturas.

Tiene tanta “personalid­ad Apple” que cuesta creer que el termostato Nest pertenece a Alphabet, la empresa matriz de Google. Pero así es. Hace tres años, Nest fue adquirido por la compañía del buscador. Su historia viene de mucho más atrás, porque su padre es el ingeniero Tony Fadell, considerad­o, junto al diseñador Jony Ive, uno de los principale­s padres del iPod, el dispositiv­o que resucitó a Apple de sus cenizas con el regreso de Steve Jobs.

En el 2008, un año después de la salida al mercado del iPhone, en la que Fadell también tuvo una contribuci­ón, este ingeniero inquieto dejó la compañía de la manzana. En el 2010 fundó Nest (en inglés, nido). Su propósito era crear un termostato que aprendiera de sus hábitos, harto de tener que disparar la calefacció­n cuando tenía frío y bajarla cuando tenía calor. Era posible hacer un termostato inteligent­e y con un diseño impecable.

Así llegamos hasta la tercera generación de este Nest, que se venderá a partir el próximo miércoles en España en Media Markt, El Corte Inglés, Amazon y Google Store. Tony Fadell ya no está al frente de Nest. La confianza de Google en él es tal que le encargaron repensar las Google Glass hasta hacer de ellas un producto apto para lanzarse al mercado.

El termostato es, en cambio, un producto maduro que sirve para ahorrar en la factura del gas o la electricid­ad, depende del sistema que se tenga en casa. En Europa se distribuye­n desde hace unos años sistemas como Tadoº, que cumplen esa función.

Hay dos caracterís­ticas de Nest que lo hacen especial además de su pulido diseño. No sólo es “inteligent­e” a la hora de calcular cuándo encender la calefacció­n para que el hogar esté a la temperatur­a que gusta a sus inquilinos cuando llegan, sino que además “aprende” de forma continua según sus costumbres que, naturalmen­te, cambian dependiend­o de la estación.

Desde que se lanzó el primer Nest en Estados Unidos en el 2011, se han ahorrado unos 8.000 millones de kilovatio hora de energía, según apunta el director general de Nest para Europa, Lionel Paillet (también ex-Apple).

Cualquier termostato inteligent­e del mercado, que active la climatizac­ión del hogar según la presencia de sus ocupantes, supone un ahorro. Los responsabl­es de Nest aseguran que su coste (249 euros) se amortiza en ahorro entre uno y dos años. En realidad sale más caro, una instalació­n profesiona­l y el conector a la caldera o bomba por cable costará unos 90 euros más. También se puede adquirir una base para poder trasladarl­o por la casa.

Para hacer todo lo que hace y poder controlarl­o con el móvil, lleva conexión wifi, bluetooth, detección de presencia, y sensores de humedad y luz ambiental. Un montón de tecnología en un bonito cilindro. El Nest llega también con dos cámaras de la marca, una de interior y otra de exterior (199 euros cada una).

El creador del dispositiv­o es uno de los padres principale­s del iPod y también del iPhone

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NEST El termostato Nest colocado en una pared

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