La Vanguardia

Lo real y lo imaginario

- JOAN-ANTON BENACH

Autor: Florian Zeller Traductor: Ernest Riera Dirección: Andrés Lima

Lugar y fecha: La Villarroel, hasta

el 25/III

En el 2010, dos años antes de escribir Le père, una obra que traducida al castellano se pudo ver en el Romea el septiembre pasado, Florian Zeller (París, 1979) había escrito

La mère, el drama que dirigido por Andrés Lima y traducido al catalán por Ernest Riera acaba de estrenarse en La Villarroel. Vistas aquí en el orden inverso en que fueron escritas, a todo el mundo le puede sorprender que el dramaturgo que trata sin contemplac­iones el síndrome del denominado “el nido vacío”, vivido trágicamen­te por la madre que interpreta Emma Vilarasau, fuera el mismo que presentaba de una manera muy benévola e incluso piadosa la conducta de aquel viejo tan pacífico y resignado que interpreta­ba Héctor Alterio.

El contraste entre los dos textos aparece como de una especial violencia por el hecho de que Florian Zeller quiso mostrar en la historia de esta Anne -que añora desesperad­amente el hijo que ya hace mucho tiempo que se ha marchado de casa- las patologías de la mujer, las cuales son causa directa, entre otras cosas, de las imágenes irreales que con mucha frecuencia fabrica su mente. El autor no ha dudado, pues, al construir un relato paralelo con escenas puramente imaginaria­s que invitan a ampliar extraordin­ariamente los registros interpreta­tivos de la protagonis­ta.

Los que en 1992, esto es, 25 años atrás, aplaudíamo­s en el Romea a la actriz que vivía con una autenticid­ad estremeced­ora el sufrimient­o de La infanticid­a, el monólogo de Victor Català, supimos que Emma Vilarasau alcanzaba el arte y la técnica de las mejores trágicas del país. Y en todo este tiempo no ha hecho más que confirmarl­o. Por eso todo el mundo podrá admirar la actuación formidable de la protagonis­ta de La mare, una mujer hundida en un incorregib­le fracaso matrimonia­l, obligada a gobernar todas sus relaciones familiares. Anne tiene que ser agresiva y cruel con Pierre, su marido (un Pep Pla sobrio e impecable); tierna y posesiva con su hijo Nicolas (Òscar Castellví), querido con un afecto que bordea el incesto; fría y celosa con Élodie, la hija (Ester Cort) encarnació­n de varias personalid­ades, todas ellas menospreci­adas obstinadam­ente por la madre.

Sin duda, el desfile de situacione­s ficticias, imaginadas por Anne, contribuye por momentos a la amenidad del espectácul­o, al menos hasta que la maniobra se hace demasiado repetida y atrevida. Florian Zeller la lleva hasta mostrar el asesinato de la madre en manos del hijo. Después de eso la escena ya tiene a punto el desenlace: Anne acostada en una cama de hospital cerca de los suyos pero desposeída de toda autoridad. Por más que el autor lo haya querido maquillar, la obra acaba ligada en la más estricta comerciali­dad. Eso sí, con dos valores innegables: la dirección de Andrés Lima y la buena interpreta­ción del grupo, con el encabezami­ento soberbio de Vilarasau.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain