La Vanguardia

El experto

Umtiti sabe ganar y marcar en el Parque de los Príncipes

- CARLES RUIPÉREZ

Alos miembros de la selección francesa de balonmano que acaba de ganar el Mundial se les conoce como les experts por su longevidad a la hora de levantar títulos. Lo mismo se puede decir en Francia del PSG, que se ha adjudicado 13 de los últimos 16 trofeos nacionales. No dejan ni las migajas desde la Copa del 2014. Son ya nueve títulos de carrerilla. Nadie en el Barcelona conoce mejor al rival de la Champions que Umtiti, que se enfrentó once veces a ellos con el Olympique de Lyon.

Por nivel y proyección, Samuel Umtiti (Yaoundé, 1993) estaba destinado a jugar en el gran proyecto de París. Sólo hubo un problema: el PSG no paga grandes cantidades por jugadores franceses. Desde que el jeque compró el club sólo dos fichajes nacionales han superado los 20 millones (Cabaye (23) y Kurzawa (25). Ahora para guardar las espaldas en el eje de la zaga a Thiago Silva y Marquinhos, han elegido al canterano Kimpembe.

Así que el central escogió al Barcelona, donde nadie le discute el galardón honorífico de mejor fichaje de la temporada. “Otros cuando llegan a Barça o Madrid se diluyen en su rendimient­o. En el caso de Umtiti no sólo está igualando el del Lyon, sino que lo está mejorando”, analiza Luis Enrique. Por eso, el técnico le cuida. En Mendizorro­za le retiró con 0-5 para tenerlo mañana en las mejores condicione­s, ya que, con la lesión de Mascherano, el francés debe hacer pareja con Piqué. Será su quinto partido seguido de titular.

El duelo contra los parisinos motiva a Umtiti. De hecho, el central tiene una espina clavada con el gigante francés, al que sólo ha derrotado en dos ocasiones –ha perdido siete veces– y al que no gana desde abril del 2014. “Es un placer volver a Francia. El PSG tiene un gran equipo. Yo he perdido varias veces allí y espero que esta vez eso cambie”, reflexiona sobre la visita.

Donde el PSG realmente se cebó con Umtiti fue en eliminator­ias. Y eso que los duelos directos empezaron decantándo­se a favor del central, que el 21 de marzo del 2012, en su primer cruce, eliminó a los parisinos de la Copa de Francia (1-3). Sin embargo, después la historia viró y el equipo de la capital le apeó dos veces de la Copa de la Liga, una de la Coupe y le ganó la final de la Supercopa del 2015.

Eso sí, el internacio­nal francés del Barcelona sabe lo que es marcar un gol en el Parque de los Príncipes. Fue el tanto del empate en un 1-1 en un córner. Su disparo tocó en Aurier antes de entrar. Umtiti lo celebró con Lacazette simulando que se hacían una autofoto.

Tras la Eurocopa, donde llegó como invitado y acabó como titular y subcampeón, el defensa no ha tardado en dejar su huella en el Barça. En los dos partidos contra el City fue el jugador (de los dos equipos) que más pases dio. Y contra el Borussia Mönchengla­dbach completó 119 entregas.

Y aunque aún no se ha estrenado como goleador, su zurda fue el inicio del gol de Suárez al Atlético el martes pasado. Umtiti amagó con pasar a Piqué, engañó a Torres y Griezmann y se la dio con ventaja a André Gomes. Con el 92% de acierto, supera en porcentaje de pase a otros centrales de futuro como Varane, Bartra o Stones. Pero Umtiti ha sido de rendimient­o inmediato, a diferencia de otros centrales franceses como Dehu, Christanva­l, Blanc o Thuram que no se afianzaron en el Camp Nou. Pese a su juventud, mañana será un experto.

Sin Mascherano, el francés hará pareja con Piqué en un duelo que le motiva por la rivalidad con el PSG

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ÀLEX GARCIA / ARCHIVO Samuel Umtiti salta por encima de Denis Suárez para despejar de cabeza en un entrenamie­nto

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