Retraso en el inicio de la negociación del Brexit
La Unión Europea empieza a resignarse a un comienzo de las negociaciones para la salida del Reino Unido más tardío que el previsto inicialmente. Los problemas del Gobierno británico para conseguir la aprobación parlamentaria a la activación del artículo 50 del tratado que desencadenará el Brexit es uno de los factores que puede impedirle mover ficha la próxima semana, como se especulaba. Pasada esa fecha, el problema viene por el calendario de la propia Unión Europea y su deseo de que el inicio del divorcio del club no contamine las celebraciones por el 60.º aniversario del tratado de Roma del próximo 25 de marzo. Italia ha sido categórica en este punto con el Reino Unido y su primera ministra, Theresa May, se ha comprometido a no interferir con esa cita, que pretende lanzar un mensaje de unidad sobre el futuro europeo. “No necesitan ganarse más enemigos en estos momentos”, explican fuentes comunitarias. La previsión es que Londres envíe a finales de marzo una carta a Bruselas indicando su deseo de abandonar el club al que se sumó en 1975 y explicando qué tipo de relación futura desea mantener. Desde ese momento, el resto de países precisará alrededor de un mes (podría ser más, por coincidir con la Semana Santa) para pactar sus posiciones negociadoras, que deberán acordar en una cumbre extraordinaria en abril. El tratado prevé dos años para completar las negociaciones de salida de un Estado miembro.