Mala cosecha en La Canonja
El colapso de Cambrils, hace un año, no ha evitado otro susto en el sector
El colapso de la sección de crédito de la cooperativa de Cambrils atrapó, hace poco más de un año, los ahorros de 1.500 familias. Se destapó un agujero de casi diez millones de euros, se encendieron todas las alarmas, se aceleró el proceso de externalización de las secciones de crédito y se constituyó un fondo de liquidez, que no estuvo exento de críticas. Algunas cooperativas no estaban dispuestas a pagar los platos rotos por la mala gestión de otras... Hace unos días, la historia ha vuelto a repetirse. Afortunadamente, las cifras de La Canonja no son las de Cambrils, pero eso qué más les da al medio millar de socios que tienen sus ahorros atrapados desde hace semanas. Ni el presidente de la cooperativa, ni el director de la sección de crédito –padre e hijo, respectivamente– han hecho pública la situación real de la entidad. Se hablaba de un agujero de dos millones que han resultado ser casi tres, más las deudas con Hacienda y las concesiones de créditos, que superan el medio millón. La actividad agraria, que da sentido a las cooperativas, ha caído en picado en La Canonja y la entidad sólo facturó 320.000 euros en el 2016. Y aun así... ¿nadie sospechó? Ni la “tutela prudencial” de la Generalitat, ni la Federació de Cooperativas, ni los socios, que deberían fiscalizar la gestión de la entidad en las asambleas, han evitado el desenlace. Algo sigue funcionando mal en la gestión y control de algunas cooperativas. ¿Quién pagará ahora los platos rotos?