MURALES CALLEJEROS
Pero Art Basel no es el único evento, aunque sí el buque insignia de esta semana de explosión artística en Hong Kong. En paralelo hay más actividades y exposiciones. Una de las más interesantes es Art Central, su hermana pequeña. Se celebra en el paseo del muelle de Central, el corazón de la urbe, y acoge a un centenar de galerías más modestas y con artistas más noveles, con lo que ofrece una visión más abierta y asequible para los amantes del arte con un poder adquisitivo más moderado. Y si uno quiere compaginar los dos certámenes puede hacerlo fácilmente. Desde Art Central se puede acceder a Art Basel en un paseo de diez minutos por las principales avenidas comerciales de la ciudad o bien con el autobús gratuito que enlazará las dos muestras, aunque para acceder a Wanchai, donde se ubica Art Basel, también se puede optar por el ding ding, como se denomina popularmente al tranvía. Pero si uno lo que busca es el arte alternativo, no puede perderse el festival de pinturas murales que impulsa la organización sin ánimo de lucro HK’Walls y que acoge a artistas del spray y del pincel de todo el mundo. Este año se han trasladado al distrito industrial de Wong Chuk Hang, a dos paradas de metro de Admiralty, desde el centro histórico de Sham Shui Po, en Kowloon. Allí aun se pueden admirar las obras del año pasado. Hay algunas realmente interesantes. En resumen, no hay que perderse la fiesta del arte de Hong Kong. Es la otra cara del corazón financiero de Asia.