El metro se reforzará durante los episodios de contaminación
Las líneas 1 y 5 aumentarán la frecuencia de paso los días que estén vetados los coches más viejos
La prohibición de circulación de los vehículos más contaminantes durante los episodios de contaminación atmosférica a partir de diciembre –y en el 2019 de manera permanente– irá acompañada de medidas de refuerzo del transporte público. La promesa realizada cuando se anunció el veto a los coches más viejos empieza a tomar forma. La Generalitat de Catalunya ya ha redactado un primer documento consensuado con el Àrea Metropolitana de Barcelona (AMB) y el Ayuntamiento de Barcelona en el que se establecen las primeras acciones en materia de movilidad que se llevarán a cabo.
En el interior de la capital catalana la medida más relevante será el refuerzo estructural de las líneas 1 y 5 de metro en hora punta. La línea 1 (Fondo - Hospital de Bellvitge) es la más utilizada de la red y la 5 (Corneción llà Centre - Vall d’Hebron) es la tercera en número de usuarios diarios. La frecuencia de paso de los convoyes en ambas líneas se aumentará tanto por la mañana (de 7 a 9.30 horas) como por la tarde (de 17 a 19 horas). También se reforzará el servicio en algunas líneas de autobús de TMB. En este caso el incremento de unidades se focalizará en algunas de las líneas horizontales de la nueva red ortogonal.
En el entorno metropolitano más inmediato de Barcelona también habrá un refuerzo visible del servicio de autobuses. Las líneas que entran a la capital catalana desde el Baix Llobregat contarán con entre 12 y 15 autobuses adicionales. Un refuerzo similar se producirá en las líneas del Barcelonès Nord. El tranvía, por su parte, pondrá en circulación más unidades dobles para ganar capacidad en la T1 (Bon Viatge - Francesc Macià) y en la T4 (Sant Adrià - Ciutadella Vila Olímpica). Las líneas del Trambesòs contarán con más circulaciones en las horas valle y el Trambaix reducirá el intervalo de paso hasta los cuatro minutos entre Esplugues y Barcelona desde las siete de la mañana hasta las diez de la noche.
Con todo, el principal reto es ofrecer alternativas sólidas y fiables a las personas que hacen desplazamientos interurbanos desde más allá de Barcelona. “Somos conscientes de que si se limita la circula- hay que hacer una apuesta potente por ofrecer servicios de calidad”, remarca el secretario de Infraestructuras y Movilidad, Ricard Font.
Rodalies, con unos 400.000 viajeros diarios, es la opción más potente como alternativa al coche para desplazarse hasta Barcelona pero el delicado estado de la maltrecha infraestructura complica las cosas. La Generalitat, como titular del servicio, está estudiando la viabilidad de ampliar las frecuencias entre las siete y las once de la mañana. Conscientes de que la capacidad de las vías no se puede poner más al límite, la opción que gana enteros es la prolongación de la hora punta hasta las once de la mañana y la incorporación de unidades dobles en ese lapso de tiempo.
Algo similar se plantea en Ferrocarrils de la Generalitat (FGC). Tanto la línea del Vallès como la Llobregat-Anoia incrementarán la frecuencia de paso durante las horas valle. En el caso del Llobregat, además, contará con más unidades dobles para aumentar la capacidad de los trenes.
Font incide en que “el transporte público tiene una demanda muy concentrada en las horas punta y, en cambio, en otros momentos va vacío”. Por eso se busca también laminar la demanda y flexibilizar la hora de entrada al trabajo y a los centros educativos durante los episodios de contaminación. El Gobierno catalán está trabajando en la posibilidad de que los trabajadores públicos puedan entrar a la oficina a lo largo de la mañana en lugar de a primera hora y la idea se quiere trasladar a grandes empresas del sector
privado. En las principales estaciones de Renfe, la Conselleria de Territori pondrá 32 informadores encargados de ayudar a aquellos pasajeros que no acostumbran a utilizar el transporte público. El refuerzo de personal también está previsto en las estaciones de metro e incluso en algunas de las paradas de autobús más frecuentadas.
Una de las funciones del personal será explicar a los usuarios esporádicos que durante el episodio de contaminación ambiental pueden adquirir la T-Ambiental, un nuevo billete de transporte que permitirá hacer durante ese día dos viajes (ida y vuelta) por 1,80 euros, el mismo coste que les supone a los viajeros que usan la T-10.
El plan de trabajo para aplicar en episodios de contaminación atmosférica centra especial atención en la mejora de las opciones de transporte por carretera, con un refuerzo de las líneas de autobús exprés.cat, que conectan diversos municipios con la capital catalana sin paradas intermedias. Entre las que tendrán más autobuses estarán las conexiones de Barcelona con Mataró, Caldes de Montbui, Vic, Igualada, Vallirana y Sant Pere de Ribes. La Conselleria de Territori calcula que habrá unos 25 autobuses más de los habituales prestando servicio en las líneas exprés.cat.
Para dotar de mayor competitividad al servicio de autobús se blindarán los carriles bus para que sólo puedan circular por ellos quien le corresponde. La Conselleria de Territori contempla la opción de que los carriles bus puedan ser utilizados por vehículos con más de tres ocupantes. Igual que se controlará que no circulen los vehículos vetados, también se vigilará que nada ni nadie obstaculice la circulación de los autobuses. Además, se habilitarán carriles bus puntuales con conos en determinados puntos. Uno de ellos será en la autopista B-23, que contará con un carril añadido desde Molins de Rei hasta Zona Universitària, donde enlazará con el ya existente en la Diagonal. El carril bus de entrada a Barcelona por la Gran Via desde el sur del Baix Llobregat también empezará antes. Estará delimitado con conos desde Bellvitge para evitar que los autobuses queden atrapados en un punto que acostumbra a registrar importantes atascos en hora punta.
Para los conductores que se desplazan desde pequeños municipios sin un servicio potente de transporte público se ha planeado la creación de aparcamientos disuasorios
(park and ride) cerca de estaciones ferroviarias que cuentan con gran capacidad. La Generalitat prepara la redacción de un plan director urbanístico que ubique en el mapa los posibles park and ride en el entorno metropolitano. El primer borrador apunta al aprovechamiento de instalaciones como los grandes aparcamientos de centros comerciales que hay en el Baix Llobregat e instalaciones lúdicas y deportivas del Vallès y el Maresme. También hay identificados parkings de estaciones de Rodalies con margen para acoger más automóviles como las del Prat de Llobregat, Granollers Nord, Cerdanyola Universitat y Vilanova i la Geltrú.
Todo ello forma parte del plan para episodios de contaminación, cuyas medidas de carácter puntual pasarán a ser permanentes poco después. “Los episodios deben servir como una prueba de lo que luego se asumirá con normalidad”, apunta Ricard Font, que se muestra convencido de que ahora es el mejor momento para tomar este tipo de medidas en un marco de crecimiento de usuarios del transporte público y con la T-Mobilitat a punto de implantarse. En paralelo, el Gobierno catalán presentó la semana pasada el plan de transporte de viajeros 2020, en el que se establecen inversiones por valor de 2.080 millones de euros para mejorar de manera estructural el transporte interurbano con la optimización de Rodalies y FGC y la culminación del despliegue de la red de autobuses exprés.
Se habilitará un carril bus con conos en la autopista B-23 y se vigilará que sólo lo use quien puede hacerlo La Generalitat estudia permitir los coches con más de tres ocupantes en los carriles bus de acceso a la ciudad