La descontaminación de Ercros durará hasta el 2022
En la limpieza del suelo industrial se ha sacado por ahora el 20% de los residuos líquidos vertidos por la química en Flix desde 1897
Más luz sobre uno de los episodios más oscuros de la contaminación ambiental en el sur de Europa. Ercros, heredera de una actividad química iniciada hace 120 años en Flix (Ribera d’Ebre), junto al río Ebro, hace públicos ahora los datos referentes al proceso de descontaminación de su suelo industrial. La limpieza, iniciada en el 2014 y aún en marcha, con la extracción ya de más de 212 toneladas de residuos líquidos orgánicos, un 20% del total, no podrá acabarse antes del 2022.
Es el tiempo que se necesita para poder seguir captando y depurando todas las aguas subterráneas contaminadas, adelanta la empresa. “No se puede acelerar más, pero la zona afectada está sellada y aislada, por lo que no supone ningún tipo de riesgo para la salud de las personas ni para la seguridad. El proyecto de saneamiento durará el tiempo que sea necesario”, garantiza Teresa Conesa, directora de Ercros.
En paralelo a la extracción de los residuos, los responsables de la fábrica procedieron al sellado de las zonas afectadas para garantizar el aislamiento de la contaminación, especialmente de las aguas subterráneas. Un 8% de toda la superficie de la fábrica, de 300.000 m2, ha sido declarado suelo contaminado por la Agència Catalana de Residus (ACR).
El estudio de caracterización realizado por Ercros, por ley con carácter retroactivo, por la contaminación desde 1898, ya puso al descubierto en el 2005 la presencia de compuestos químicos organoclorados, mercurio y residuos líquidos en los suelos y las aguas subterráneas de la fábrica.
Ercros asegura que a pesar de que el próximo diciembre cerrará la planta de producción de cloro de Flix, uno de los principales focos de contaminación por el uso del mercurio, no cesará su actividad. Garantiza también la química que no se irá sin acabar la limpieza de sus suelos, para que puedan establecerse nuevas industrias.
“Los terrenos industriales ya no suponen ningún riesgo para la salud ni la seguridad de las personas”, insiste Conesa. Ercros calcula que quedan todavía por extraer 800 toneladas de residuos líquidos orgánicos. El volumen de la contaminación acumulada, tras un siglo de actividad fabril, es mayúsculo: 19.000 m3 de residuos sólidos “históricos” aislados y 64.000 m3 de aguas subterráneas depuradas desde el 2014.
Ercros asegura que en sus últimos análisis, bajo la supervisión de la ACR, no se han detectado nuevos focos de contaminación en la zona industrial. Ahora se están estudiando cinco presuntos puntos de vertidos detectados fuera de la planta.
En el pantano, junto a la química, la empresa estatal Acuamed tiene pendiente la extracción de 100.000 m3 de lodos tóxicos, abandonados por la empresa adjudicataria bajo las aguas del Ebro. La limpieza no acabará antes del 2019. Los expertos de la Comisión de Seguimiento de la descontaminación de Flix, bajo el auspicio de Generalitat y Ayuntamiento, visitan hoy la planta de Ercros, la misma semana en la que la empresa ha decidido reforzar su transparencia.
Al año se extraen de las aguas subterráneas de la fábrica 110 kg de mercurio y 1.400 kg de compuestos químicos