Las reglas de las primarias del PSOE enconan la pugna
Ferraz impone su control a la financiación de los aspirantes
El censo y las afiliaciones de los militantes, la financiación de las campañas, los avales de los candidatos, el voto telemático, la doble vuelta y la regulación de todo el proceso, además del calendario previsto... Aún no ha empezado oficialmente la campaña de las primarias socialistas –que ni siquiera están aún formalmente convocadas, salvo que se han fijado para mayo– y ya la tensión es máxima entre los equipos de los aspirantes a liderar el PSOE. Los recelos, las sospechas y los reproches mutuos entre los fieles a Susana Díaz, Pedro Sánchez y Patxi López, y las acusaciones de imparcialidad contra la gestora que pilota desde Ferraz todo el proceso –pues Javier Fernández y Mario Jiménez, pese a su proclamada neutralidad, son vistos por sus críticos como simples peones de la presidenta andaluza– amenazan ya con embarrar el terreno de juego y auguran un proceso muy bronco.
Para los defensores de Díaz, el responsable de todas las polémicas que ya están arrojando sombras de “pucherazo” sobre el aún no nato proceso de primarias es el equipo de Sánchez. Con un objetivo, a su juicio, evidente: “Es la táctica del perdedor”. Es decir, criticar al árbitro –en este caso, la gestora– porque el partido lo saben perdido de antemano. Para el equipo de Sánchez, en cambio, es Díaz la que, a través de la gestora, pretende controlar todo el proceso en beneficio propio y detrimento de sus adversarios. “Normalmente, el equipo que va perdiendo trata de embarrar el terreno de juego y parar el partido. Nosotros, una sonrisa”, replicó ayer el estratega de la campaña de Pedro Sánchez, Alfonso Gómez de Celis.
Tras la batalla que los contendientes ya emprendieron por las afiliaciones de militantes –con inscripciones de 20 personas en bloque en una agrupación de Sevilla, o las 180 afiliaciones en Albacete que aparecieron “en un cajón” de Ferraz tras la expulsión de Sánchez–, ayer la pugna se enconó por la pretensión de la gestora de controlar la financiación de las campañas de los candidatos. Singularmente, por las cautelas que en Ferraz había despertado el sistema de crowdfunding que puso en marcha la candidatura de Sánchez, y que ayer ya llevaba recaudados casi 80.000 euros. El temor es que dicha recaudación de
Los equipos de Díaz y Sánchez se enzarzan ya en ataques mutuos, lo que augura una campaña muy bronca
fondos para un candidato a liderar el PSOE pueda vulnerar la ley de Partidos. Por ello, el gerente del PSOE, Gregorio Martínez, se dirigió a las tres candidaturas para advertírselo y poner a su disposición dos cuentas corrientes –una de ingresos y otra de gastos– de titularidad compartida entre Ferraz y los designados por los aspirantes. La de ingresos será “la única cuenta existente” para captar fondos de cada candidatura, y obligará a identificar a los donantes con nombre y DNI. Un intento “más que evidente”, según criticaron algunos fieles a Sánchez, de controlar sus cuentas y a sus donantes, mediante un sistema que sí ven totalmente irregular. Temen, además, que la gestora quiera imponer un plazo para la recogida de avales –con la Semana Santa de por medio– que les perjudique en beneficio, “una vez más”, de Díaz.
El equipo de Patxi López, por su parte, sí aceptó la “recomendación” sobre la cuenta corriente de Ferraz, y llamó a “no sembrar dudas” sobre el censo, pero reclamó también –como el equipo de Sánchez– el voto telemático en las primarias si se garantiza que sea “individual, libre y secreto”. Y demandó, en todo caso, “un proceso ejemplar donde la gestora garantice de manera imparcial la transparencia del mismo y la igualdad entre las candidaturas”.
El responsable de organización de la gestora, Mario Jiménez, ha convocado el próximo martes a representantes de las candidaturas para intentar apagar el incendio que ya se extiende imparable en amplios sectores del PSOE.