Libertad bajo fianza para el yerno de la viuda del expresidente de la CAM
El juez defiende la medida cautelar a pesar de considerarle sospechoso del crimen
El juez decretó ayer la libertad bajo fianza de 150.000 euros de Miguel López, principal sospechoso del asesinato de su suegra; María del Carmen Martínez, viuda del expresidente de la CAM, Vicente Sala. La “medida cautelar” había sido solicitada por la defensa y el instructor valora en su auto que responde al “criterio de proporcionalidad” y que existen garantías de que no va a eludir la acción de la justicia.
En su argumentación, el titular del juzgado de Instrucción 7 de Alicante, José Luis de la Fuente, subraya que persisten los indicios que apuntan a la culpabilidad del sospechoso. En su auto, el magistrado señala que “el avance en la instrucción no ha visto desvirtuar los indicios ya referidos en el inicial auto de prisión”. Pero también añade que las pesquisas realizadas “tampoco han aportado” nuevos indicios sobre el crimen cometido el pasado 9 de diciembre en Alicante. Un suceso que ha conmocionado a las élites de la sociedad alicantina.
La decisión del juez se ha tomado en contra de la acusación particular que ejerce el hijo de María del Carmen, Vicente Jesús Sala; y de la fiscalía, que no ha variado su posición. Para las partes los indicios son suficientes para que permanezca en la prisión de Fontcalent, a la que ingresó hace algo más de un mes.
Estos indicios son en primer lugar la existencia de un móvil económico. El instructor señala, al respecto, que “resulta innegable” que las decisiones adoptadas por María del Carmen Martínez en las juntas de accionistas de las firmas Samar Internacional y Compañía Española de Resinas, el 19 de septiembre del pasado año, le perjudicaban y provocaron “un clima de crispado enfrentamiento” en la familia.
Miguel López esta casado con la hija menor de la asesinada, Fanny. El juez recuerda que de aquella decisión social, el beneficiado fue el hijo de la finada y primogénito, Vicente Jesús Sala, que lograba el control de las sociedades y del patrimonio familiar; mientras se restaba poder y capacidad de gestión a las tres hijas. María del Carmen Martínez recurrió a la denominada acción de oro, que su marido Sala le había legado a su muerte, y que le confería derechos políticos privilegiados.
El juez señala que estas decisiones colocaban a la viuda “en una situación de completo control de las sucesivas decisiones a adoptar en esa y las demás compañías, incluida las del grupo del automóvil dirigidas por el investigado”.
Otro de los indicios contemplados por el instructor es el lugar del crimen, que fue en el garaje del concesionario de automóviles de gama alta que gestiona el detenido. También su supuesta habilidad en el manejo de armas de fuego. La mujer recibió dos certeros disparos en la cabeza. Y se apuntan otros indicios como las declaraciones incongruentes y contradictorias que realizó Miguel López a la policía tras su detención.
Pero el magistrado argumenta en su auto que se descarta que haya elementos que justifiquen la situación de prisión por el peligro de que el investigado vuelva a delinquir y que “existen otras medidas menos restrictivas que la prisión para garantizar que no se pueda manipular a los testigos, ni que el investigado huya del país”. Una vez que recobre la libertad, el detenido estará obligado a entregar el pasaporte, no podrá salir de España y deberá comparecer semanalmente, según las medidas cautelares dictadas por el juez.
Ahora el juez espera ampliar la instrucción a partir de los informes periciales o de carácter técnico solicitados.
El magistrado razona que en la instrucción no se han aportado nuevos indicios de su presunta culpabilidad