Mas apela a la Constitución para que le absuelva el TS
Los tres condenados del 9-N recurren por conculcación de sus derechos fundamentales El PP ofrece a Puigdemont debatir en la comisión de autonomías del Senado
El TSJC descarta archivar la causa contra Forcadell por dejar que el Parlament debatiera sobre el referéndum
Una jornada más, la actualidad política pasó por los tribunales. Artur Mas, Joana Ortega e Irene Rigau anunciaron que recurrirán al Tribunal Supremo su sentencia por el 9-N. Paradójicamente los tres condenados se amparan en que la Constitución se ha vulnerado para condenarlos... por desobedecer al Tribunal Constitucional.
Además, ayer, en el mismo día, el Tribunal Superior de Justícia de Catalunya (TSJC) rechazó desestimar la querella contra Carme Forcadell y tres miembros de la Mesa del Parlament por no paralizar el debate sobre el referéndum. En paralelo, el presidente de l TSJC, Jesús Barrientos, insistía en Tarragona en que “las instancias judiciales no resolverán algunos conflictos”.
Los abogados de Artur Mas, Joana Ortega e Irene Rigau anunciaron ayer al TSJC que recurrirán la sentencia que les condena a dos años, 21 meses y 18 meses, respectivamente, de inhabilitación por desobedecer al Tribunal Constitucional con la celebración del 9-N, paso previo de la formalización del recurso ante el Tribunal Supremo, aunque la vista de los letrados está puesta, realmente, en el Tribunal Europeo de los Derechos Humanos, pues se alude a la vulneración del Convenio Europeo de Protección de los Derechos Humanos y las Libertades Fundamentales.
Pero para llegar a Estrasburgo, primero hay que pasar por Madrid, y dos veces, por el Tribunal Supremo y por el Tribunal Constitucional, porque primero hay que agotar todas las instancias judiciales españolas.
Los abogados de Mas, Ortega y Rigau (Xavier Melero, Rafael Entrena y Jordi Pina) barajan argumentos similares para solicitar la revocación de la sentencia del TSJC, de los que se desprende una primera idea: los acusados se amparan en que la Constitución fue vulnerada para condenarlos por desobedecer al Tribunal Constitucional. ¿En qué? Pues en preceptos como la igualdad ante la ley, la libertad ideológica y de expresión, la libre participación en asuntos públicos o la tutela judicial efectiva, entre otras, amén de que esgrimen también que las pruebas fueron mal valoradas.
La existencia de los recursos, también de la Fiscalía, fue valorada ayer en Tarragona por el presidente del TSJC, Jesús Barrientos, quien aseguró que tomaron “la decisión correcta” de forma “libre e independiente”. Pero Barrientos también hizo mención a la situación general, para alinearse con Pérez de los Cobos, ex presidente del TC, y declaró que “las instancias judiciales no resolverán algunas situaciones”, y reclamó a los políticos que no busquen en los tribunales soluciones al problema independentista.
Todo esto ocurría el mismo día en que el TSJC rechazaba el recurso de Carme Forcadell y tres miembros de la Mesa del Parlament contra la admisión de la querella de la Fiscalía por no paralizar una resolución sobre el referéndum. Los jueces, a pesar de no entrar en el meollo del asunto, se expresaron en términos contundentes en referencia a la actuación de los querellados. Sostienen que Forcadell y los diputados de la Mesa de Junts pel Sí pudieron infringir la Constitución de forma “intencionada, patente y clamorosa” al adoptar decisiones “arbitrarias”, siendo plenamente “conscientes de su ilegalidad”.
Todo ello fue, a juicio del Tribunal Superior , un plan preconcebido. Por esta razón avala que esta segunda causa abierta contra Forcadell y los tres diputados de la Mesa se investigue junto a la primera que se instruye contra la presidenta del Parlament por haber permitido la votación de las resoluciones sobre el proceso constituyente y que está prácticamente lista para su enjuiciamiento.