Dos estudiantes de mecánica crean un dron para detectar minas antipersonas
Instituciones de Sudáfrica y Colombia se interesan por el prototipo por su bajo coste
Jesús Suriol y Daniel Llopart, dos alumnos del ciclo formativo de grado superior de mecánica del centro Salesians Sarrià (Barcelona), acaban de recibir el galardón especial del Ministerio de Defensa en los premios Nacionales Don Bosco a la investigación e innovación tecnológica por el diseño y desarrollo de Dron500, un robot volador pensado para localizar e identificar minas antipersona y cualquier otro material bélico u objeto metálico bajo tierra.
Dron500 –fruto de un trabajo de síntesis de final de grado–pesa cuatro kilos y puede cargar otros cuatro, de modo que también puede utilizarse para trasladar y entregar material médico u de otro tipo en zonas de difícil acceso. Tiene una autonomía de vuelo de quince minutos, está fabricado con aluminio aeronáutico para favorecer su ligereza y su resistencia mecánica, y está diseñado para trabajar en ambientes hostiles o terrenos abruptos y para poder deformarse sin que un accidente afecte a su estructura principal y las partes externas dañadas puedan reponerse fácilmente. Incorpora una cámara, GPS, y puede volar de forma autónoma siguiendo un recorrido previamente programado, y emite diferentes sonidos en función del tipo de objeto metálico que detecta, lo que puede permitir identificar y marcar en el mapa la situación de minas antipersonas para después enviar a los especialistas a desactivarlas.
En realidad este tipo de tareas también las hacen otros drones, pero la ventaja de Dron500 es que ofrece estas prestaciones con un coste de producción de unos 3.000 euros frente a los cientos de miles que cuestan sus competidores. Y esta cifra podría incluso reducirse en caso de fabricarse en serie.
De ahí que el prototipo construido por Suriol y Llopart –ellos han dibujado y fabricado todas las piezas excepto el circuito electrónico– ya haya despertado el interés de organizaciones de Sudáfrica y Colombia (el segundo país del mundo más afectado por las minas antipersonas), que han propuesto al centro educativo de Barcelona establecer algún tipo de colaboración que permita continuar e impulsar el proyecto de Dron500.
Los profesores del departamento de Mecánica de Salesians Sarrià que supervisaron la construcción del dron –Raúl Fernández y Pau Giralt–, tienen previsto dar continuidad al proyecto a través de los trabajos de fin de grado de otros alumnos del centro, puesto que Suriol y Llopart ya han acabado sus estudios. No descartan, por ejemplo, incorporar al dron un equipo adicional para que además de localizar las minas pueda desactivarlas aprovechando el proyecto de otros alumnos que trabajan en un robot desactivador de explosivos.
No obstante, aseguran que están abiertos a colaborar con las organizaciones y los gobiernos que deseen acceder a la tecnología que han desarrollado porque el proyecto se concibió con una finalidad social y por ello eligieron trabajar con software libre. “La idea es que cualquiera pueda acceder a esta tecnología, que pueda montar su dron y controlarlo con nuestro programa de software libre”, comenta Suriol. Fernández agrega que están dispuestos a establecer acuerdos de colaboración con los interesados “porque nosotros, como institución educativa, no tenemos intención de comercializarlo”.