Isla Mauricio
Ya lo dijo Mark
Twain: “Dios creó primero Mauricio y después el cielo”. Esta paradisíaca isla situada en el suroeste del océano Índico fusiona como ninguna otra la cultura, la gastronomía y la historia de los pueblos que han vivido en ella. Antiguo hogar de los extintos pájaros dodo, las razones para visitarla no se acaban nunca. De momento, os damos siete motivos para volar hasta ella.
1 Nadar con delfines. Estamos en uno de los mejores lugares del mundo para hacerlo. Durante dos horas, puedes descubrir cómo viven estos simpáticos animales en su hábitat. Otras opciones incluyen excursiones a bordo de un barco pirata o en submarino. 2 Deportes náuticos para todos los gustos. Buceo, windsurf, kitesurf, esquí acuático, kayak, navegación a vela... En la isla Mauricio se puede pacticar todo tipo de deportes en un entorno de ensueño y durante todo el año.
3 Pasión por las flores. En el Jardín Botánico de Pamplemousses puedes descubrir más de ochenta variedades de palmeras, ver el famoso ‘árbol de la sangre’ (cuya resina cura enfermedades de la piel), visitar un estanque de nenúfares enormesm y sorprenderte con tortugas gigantes.
4 Colores únicos. Tonalidades ocres, rojizas, naranjas y verdes se combinan en La Tierra de los Siete Colores como si de un cuadro se tratara. Esta impresionante atracción turística, muy próxima al pueblo de Chamarel, se ha formado con cenizas volcánicas.
5 Mercados tradicionales. Son el mejor lugar para encontrar productos típicos de la isla; entre ellos, azúcar, maquetas de barcos antiguos y ron. Los mejores son los de Port Louis, el de Quatre Bornes y el de Grand Baie.
6 Carácter multicultural. La sociedad mauricina se caracteriza por tener muchas culturas y religiones que viven en armonía. Desde los descendientes de los primeros esclavos negros africanos hasta chinos, hindúes, tamiles, paquistaníes y europeos.
7 Amantes del mejor golf. Referente internacional en este deporte, en la isla Mauricio hay ocho campos de golf de 18 hoyos y cinco de 9. Entre ellos, destaca el Touessrok Golf
Club, considerado uno de los mejores del mundo y situado en el sur de la impresionante isla de los Ciervos.