Los exportadores temen la creciente competencia de los países ‘low cost’
La mayor capacidad tecnológica en países como China amenaza todo el mercado
Más de la mitad de las empresas exportadoras cree que el nivel tecnológico alcanzado por las economías tradicionalmente calificadas de bajo coste, como China, India o Turquía, las hace peligrosamente competitivas y condiciona su actividad en el exterior, según una encuesta elaborada por la asociación de empresas exportadoras Amec. El director general de la entidad, Joan Tristany, explicó ayer que según el informe “es la primera en años que aparece como factor negativo la competencia de los países low cost”.
El temor de las empresas exportadoras (Amec agrupa a unas 350 en toda España, muchas de ellas líderes en mercados de nicho) es que los países de costes bajos comiencen a competir en productos de alto valor añadido gracias a las fuertes inversiones en tecnología realizadas. Tristany aseguró que esta preocupación por los países de bajo coste no aparecía en las encuestas de sus asociados desde los años 2004 y 2005. El director de Amec puso como ejemplo la fabricación de puertas automáticas, donde antes los productores chinos sólo servían a clientes como centros comerciales y ahora comienzan a entrar en productos de alta gama y especializados como puertas para quirófanos.
Aunque Amec no representa a todas las empresas exportadores, la opinión de los miembros de la asociación es representativo del sector. Agrupa tanto a grandes empresas como otras más pequeñas y dinámicas. Entre las que forman parte de Amec destacan Enconfrats Alsina, Fluidra, Metalquimia, Relats, Roca o Salicru. La preocupación de Amec es que a los fabricantes de maquinaria españoles les ocurra lo que ya sucede en la telefonía móvil –según Tristany– donde en pocos años los móviles de fabricación chinos han pasado de competir en coste por los terminales de gama baja y media a hacerlo en la gama alta, como es el caso de Huawei.
El año pasado, las exportaciones de las empresas asociadas a Amec crecieron un 3,3%, hasta los 5.400 millones de euros. Amec avisó que estas cifras revelan un proceso de desaceleración del sector exterior, ya que el año anterior el crecimiento de las exportaciones fue del 11%. Además de la citada competencia de los países de bajo coste, otros de los elementos negativos que más influyeron en las empresas fue la incertidumbre internacional.
Aun así, el conjunto de las exportaciones en España prácticamente mantuvo su peso respecto al PIB en el conjunto del país: un 33,1%, una décima menos que hace un año. El sector exterior contribuyó el año pasado al crecimiento del PIB del Estado con 0,5 puntos. La demanda interna aportó 2,8 puntos, hasta el 3,2% de crecimiento del PIB.
El presidente de la asociación, Manel Xifra, señaló que los principales países de destino de las exportaciones de la empresas asociadas siguen siendo Francia, Alemania y el Reino Unido, aunque en este último caso registraron un descenso del 7% respecto al año anterior. Xifra afirmó que el dato puede atribuirse a la caída del valor de la libra esterlina tras la votación sobre el Brexit, aunque señaló que aún es pronto para analizar sus consecuencias.
En cuarto lugar se sitúa Estados Unidos, que escala dos posiciones tras registrar un incremento de las exportaciones del 24%. En relación con las consecuencias de la elección de Donald Trump como presidente de Estados Unidos, Joan Tristany indicó que las empresas asociadas temen más por los efectos que tendrá sobre sus filiales en México que por lo que ocurra en Estados Unidos.
De cara a este año 2017, las empresas de Amec prevén un crecimiento de las exportaciones del 7%.
La incertidumbre internacional está ralentizando el aumento de las ventas en el exterior